5 errores garrafales que puedes cometer al despertar

Las primeras horas -e incluso minutos- de tu día son esenciales para determinar tu rendimiento el resto de la jornada. Es por eso que si cometes ciertos errores, es probable que tanto tu salud como tu productividad se vean afectados.

En este contexto, te presentamos 5 errores comunes que puedes cometer al despertar y que quizás ni siquiera habías notado.

1. Comienzas a vestirte y prepararte en medio de la oscuridad

Si quieres despertar bien y con ánimo, en lugar de vestirte en la oscuridad, lo primero que debes hacer es exponerte a la luz de la mañana. Esto, “porque el reloj interno de tu cuerpo es sensible a la luz y la oscuridad”. Así lo afirma Natalie Dautovich, investigadora del medio ambiente de la National Sleep Foundation de Estados Unidos, quien recomienda abrir las cortinas e incluso tomar tu desayuno en el balcón, patio o terraza, si es que tienes la posibilidad.

Otra recomendación es hacer ejercicio al aire libre “para dar señales a tu cerebro de que es hora de empezar el día”, indica.

Cuando despiertas antes de que amanezca o cuando está nublado, Michael Grandner, psiquiatra de la Universidad de Pensilvania que estudia el sueño, sugiere encender una luz muy fuerte, como las utilizadas para tratar el trastorno afectivo estacional.

2. Postergas tu alarma

Si cuando suena tu alarma, presionas el botón “postergar”, caes en la llamada “trampa de la inercia del sueño”, y en lugar de ganar minutos de sueño, los pierdes, porque sólo dormitas.
“Cuando te despiertas por la mañana, tienes esa sensación de querer volver a dormir y te sientes muy débil, eso es la inercia del sueño, es un proceso normal que ayuda a proteger tu sueño” durante la noche, dice Grandner, añadiendo que “el problema es que por la mañana puede ser muy difícil dominar eso y salir de la cama cuando quieres”.

Pero presionar el botón de postergar sólo empeora las cosas. Dautovich afirma que el sueño post alarma no es de alta calidad y te hace sentir más cansado y presionado durante el día. En vez de postergar la alarma, pon el despertador más tarde, para dormir más minutos y evitar repetir este comportamiento.

3. Tomas café en cuanto te levantas

“¿Crees que no puedes funcionar sin café? Te estás subestimando a ti mismo”, dice Grandner. “Muchas veces la gente bebe café para despertarse por la mañana, pero eso sucederá de forma natural, gracias al movimiento, la luz y el tiempo”, dice.

Las personas sobreestiman el poder de la cafeína en la mañana, pero este estimulante funciona en parte a través del bloqueo de los efectos de la adenosina, una sustancia química del cerebro que regula el sueño, dice Grandner. Dado que ésta es escasa en la mañana, no es necesario tomar café hasta llegar al trabajo o después, cuando tu cuerpo haya acumulado suficiente adenosina.
“La gente comienza a entrenarse a sí mismo para necesitar la cafeína para despertar, lo que biológicamente no es cierto. Es sólo una cuestión de inercia que el sueño se desvanezca”, asegura el profesional.

4. Te saltas el desayuno

“Después de conseguir una buena noche de descanso, tendrás que alimentar tu cuerpo adecuadamente para garantizar la productividad a lo largo del día”, dice Dautovich, quien recomienda incluir mucha fibra y proteína, con alimentos como una tostada de pan integral con un huevo duro, avena y fruta. Ojo con los desayunos con alto contenido de grasa insaturada, magnesio y potasio, porque promueven el sueño.

Además, el desayuno también puede hacerte perder peso, pues ayuda a mantener controlado tu apetito durante el día, al mismo tiempo que enciende tu metabolismo, ya que éste se desacelera si no comes en la mañana.

5. No te hidratas

Si estás de malhumor, algo confundido y muy cansado, es porque probablemente no estás hidratándote lo suficiente durante la mañana. Leslie Bonci, directora de nutrición deportiva en el Centro de Medicina del Deporte, aseguró que es de vital importancia tomar agua las primeras horas del día para rendir con eficiencia.

Bebe 2 ó 3 vasos de agua antes del mediodía, no sólo te sentirás con más energía, si no que además te otorgará resistencia y fuerza para soportar cualquier actividad posterior a tu trabajo.