La tendencia llama la atención de muchos, aunque no todos pueden recurrir a ella. Más que una práctica realizada por tatuadores, como algunos podrían pensar, es una moda desarrollada por profesionales de la odontología.

Según reportó Complex, la ‘Tattooth’ es solo utilizada por pacientes que necesitan una corona dental y que escogen su propio diseño para plasmarlo en la pieza.

El proceso es fácil: el dentista toma una impresión del diente donde será colocada la corona, para después llevar el molde a un laboratorio dental donde añaden el diseño que quiere el paciente, cuenta el mismo medio.

Las posibilidades de diseños son infinitas y cuestan desde 75 a 200 dólares, indica Complex.

La tendencia ha tomado fuerza a través de las redes sociales, en las que usuarios comparten las fotografías de las curiosas piezas dentales.

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Con información de: Pulzo