El deseo de Jewel Shuping de ser ciega comenzó en su infancia, cuando fingía serlo usando gafas oscuras.
Ella cumplió su sueño cuando hizo que le pusieran limpiador de desagües en los ojos.
Shuping, quien fue diagnosticada con Desorden de identidad de la integridad corporal (BIID en inglés), dijo que quería ser ciega desde una corta edad y que su madre la encontraba a menudo caminando por la casa con los ojos cerrados.
De niña, ella se quedaba mirando el sol después de que su madre le dijo que si lo hacía se dañaría los ojos.
Shuping aprendió a hacer las cosas del día a día desde que se quedó ciega a propósito en el 2006.
Ella le dijo a su familia que su ceguera había sido accidental, pero ellos le dejaron de hablar cuando descubrieron la verdad.
Aprendió Braille a los 20 años y consiguió que un psicólogo le vertiera limpiador de desagües en los ojos.
Dice que su condición significa que ella está convencida de que debió nacer ciega. Por eso dice que no se arrepiente.
