Instagram es una red social que se caracteriza por mostrar la vida desde una óptica estética tapizada con filtros que hacen que la realidad luzca más bella de lo que realmente es. Por lo mismo, cuando algo ya no parece tan atractivo en esta red social, se convierte en una especie de “bicho raro” y se aleja del gusto común.
Así lo comprobó en carne propia la modelo británica Stina Sanders, quien perdió momentáneamente algo de popularidad en la herramienta para compartir fotografías, cuando decidió mostrarse un poco más “real” en sus fotos, inspirándose en el caso de la ex estrella australiana de Instagram Essena O’Neill.
De este modo, Stina cambió sus habituales imágenes en bikini y rostro perfectamente maquillado, por otras menos halagadoras como sus idas al psiquiatra para tratar su ansiedad, depilando su bello facial en la ducha, o dirigiéndose a tomar un examen de colonoscopía.
“Quería ver lo que realmente sucedería si dejaba de publicar fotos glamorosas, y publicaba cosas que normalmente no compartía, ni siquiera con mis amigos, cosas que son tabú, cosas que son bastantes crudas”, dijo la joven de 24 años a revista People.
“Personalmente creo que Instagram es tan falso – la cantidad de filtros, la aerografía- así que pensé que sería interesante”, añadió.
Tras comenzar a mostrar una faceta más auténtica, perdió cerca de 3.000 de sus 14.000 seguidores. Sin embargo, luego de compartir su historia públicamente, ganó muchos más fans de los que la dejaron.
De hecho, Sanders dijo no estar preocupada por haber perdido tantos seguidores, porque recibió muchos comentarios positivos elogiando su honestidad. Es más, después de compartir su historia en algunos medios de comunicación, la joven ahora tiene más de 67 mil seguidores.
“¿A quién le importa cómo se vea tu cabello? Sólo sé feliz contigo mismo y ten confianza cuando te miras en el espejo. Eso es tan importante para simplemente ser real”, comentó la chica.
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