Un padre desesperado roba en el supermercado y ocurre algo que NADIE esperaba

Un hombre, padre de tres hijos, fue atrapado mientras robaba en un supermercado de la cadena Tesco en Bukit Mertajam, una localidad ubicada a unos 340 km al norte de la capital, de Malasia, Kuala Lumpur.

Como ocurre en estos casos, muchos de los presentes esperaban que se le diera un merecido al ladrón, un hombre de 31 años, pero sobre todo que se llamara a la policía para detenerlo.

Pero no fue esto lo que ocurrió. En un gesto insólito, el gerente del establecimiento le regaló algo de dinero cuando supo que solo robaba comida para sus hijos. Y luego ocurrió algo increíble: al ladrón se le realizó una oferta de trabajo en el lugar.

De acuerdo con el diario local The Star, el hombre, quien prefirió mantenerse en el anonimato, dijo encontrarse muy agradecido por la segunda oportunidad que le habían dado. Fue la desesperación lo que lo llevó a intentar sustraer algo de comida.

Women leave a Tesco Extra store in Kuala Lumpur, Malaysia

Hacía apenas unos días este padre había renunciado a su trabajo, después de que su esposa entrara en estado de coma durante el trabajo de parto. La mujer todavía se encuentra en el hospital Bukit Mertajam, donde ha sido visitada por personal del supermercado. El bebé no sobrevivió.

Si bien la suma de las peras, las manzanas y los líquidos que este hombre pretendía robar para su familia no llegaba al equivalente de siete dólares, fue su situación la que realmente “tocó los corazones” de los responsables del establecimiento, según contó el gerente, Radzuan Ma’asan.

Al interrogarlo en las oficinas en compañía de su hijito de dos años, Ma’asan constató que no se trataba de un “ladrón regular”.

“En mis 23 años de experiencia en la venta al por menor nunca me había ocurrido que un ladrón admitiera su actuar tan fácilmente. La mayoría estaría dando todo tipo de razones”, relató.

Pero este peculiar ladrón explicó simplemente que tiene que velar por sus tres hijos, con edades entre los dos y los siete años. Hasta ahora no se esclareció qué tipo de trabajo se le ofrecería a este padre desesperado.

“Por ahora, nuestra prioridad es asegurar que su hijo de siete años sea inscrito en la escuela”, concluyó Ma’asan.

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