Hay cuatro mujeres, un hombre y una compleja demanda involucrados en este problema.
La cosa no es simple, es tan compleja que está en tribunales. La discusión legal entre la actriz Sofía Vergara y su ex novio Nick Loeb incluye dilemas de ética, privacidad, genética. Por eso está vigente desde el 2015 y en los últimos meses ha tomado un camino bastante turbio.
En un principio solo Nick era tratado como el villano, luego de que presentara un recursos judicial para evitar que Sofía pudiese ordenar la destrucción de embriones que crearon cuando estaban juntos.
Sofía y Nick habían decidido congelar embriones para usar una madre de alquiler si eventualmente querían tener hijos. Sin embargo, no dejaron claro qué sucedería si su relación terminaba.
Ahora Sofía está casada con otro hombre, Joe Manganiello, y Nick aún desea tener los hijos que tenían material genético de la despampanante actriz.
Ella se niega, aunque él dice que criará por sí mismo a los niños. Es comprensible que aunque Sofía no tuviese responsabilidad legal sobre los bebés, se sienta compelida a apoyar en su crianza si son básicamente hijos suyos.
Claro que el equipo legal de la actriz tomó recientemente una medida muy controversial que fue apoyada por el juzgado: pedir que Nick revele los nombres de dos mujeres que tras haberse involucrado sexualmente con él se realizaron abortos.
Loeb se negó rotundamente a obedecer la orden de la corte, ante la cual presentó un recurso de apelación, y detalló que protegerá la identidad de las mujeres.
El argumento del equipo de Vergara es que Nick ha tenido numerosas oportunidades para tener hijos.
En una nota de Page Six, Loeb aseguró que “preferiría ir a la cárcel que revelar los nombres” de las mujeres mencionadas.
“Creo que tenemos que proteger el derecho de una mujer a su privacidad”.
-Nick Loeb, citado en Page Six-
