7 MISTERIOS de la Historia que los científicos siguen estudiando

A través de la historia nos hemos topado con una gran cantidad de misterios y hoy en día, gracias a la tecnología moderna y al nivel de conocimiento, algunos de ellos han podido ser decodificados y explicados exitosamente. Sin embargo, aún hay ciertos enigmas a los que no se les ha encontrado solución, lo que significa un gran reto para los científicos.

Decidimos contarte sobre algunos misterios que se han descubierto y que aún son objeto de grandes interrogantes. Y, todavía la ciencia moderna no ha sido capaz de encontrar alguna respuesta.

1. Una pirámide en la Antártida

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Se descubrió una misteriosa pirámide en la Antártida, gracias a Google Earth. Después de encontrar una durante una Expedición Antártica Británica entre 1910-1913, se empezó a dar a conocer la existencia de algunas pirámides en el polo sur de la Tierra. Y a partir de ese momento científicos de todo el mundo han estado discutiendo qué es: si una montaña ideal denominada nunatak o son simplemente huellas de una antigua civilización. Aunque, según los científicos, 100 millones de años atrás la Antártida estaba cubierta de bosques similares a los tropicales.

2. El disco de Festo

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Durante la excavación del palacio de la ciudad cretense de Festo en 1908, encontraron un disco que atrajo la atención de un gran número de científicos de diferentes partes del mundo. Se trata del primer texto impreso y estampado de la historia de la humanidad que se conserva. La escritura única del disco es totalmente distinta a la que existía en Creta en 1600 antes de Cristo, cuando se cree que fue elaborada. Existe mucha controversia entre los investigadores: algunos dicen que el artefacto fue traído a la isla, otros que fue creado justo allí. Algunos sospechan que es un código, mientras que otros aseguran que ni siquiera es un idioma. Los científicos aún sienten el mismo interés por este misterioso disco y lo calificaron como uno de los hallazgos más notables y enigmáticos del Antiguo Mediterráneo.

3. Papeles de Beale

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No se supo sobre estos criptogramas sino hasta 1865. Tiempo en que apareció información sobre un tesoro de unos 60 millones de dólares (equivalente al valor de la moneda de hoy), que fue enterrado por buscadores de oro, encabezados por Thomas J. Beale. El lugar fue cifrado en tres mensajes que ahora son públicos, gracias a un panfleto de un autor desconocido. En ese escrito aparece una historia bastante creíble, sobre la aparición de estos códigos. ¿Serán un mito o las coordenadas son reales? Eso está en discusión hasta ahora. Aún ni los expertos famosos, ni los buscadores de tesoros han podido descifrar este misterio. De hecho, cualquier persona puede intentar descifrarlo. En Internet se pueden encontrar las tres hojas con el código del mensaje. Y el panfleto original aún se encuentra en la Biblioteca del Congreso.

4. Dodecaedros romanos

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Estos pequeños objetos, de 4 a 11 cm de tamaño, se remontan a los siglos II-III antes de Cristo. En general son muy parecidos: 12 lados pentagonales con agujeros, cuyo diámetro puede variar. Aproximadamente un centenar de estos dodecaedros están hechos de bronce, piedra, hierro y hasta de oro, fueron descubiertos por arqueólogos en diferentes países, especialmente en el territorio histórico que pertenece al Imperio Romano. Con cada nuevo descubrimiento, se hacen nuevas suposiciones sobre lo que podrían ser y estas varían desde dados, candelabros, un utensilio para adivinar el futuro, elementos decorativos, herramientas para la calibración de tuberías de agua o posiblemente un molde para tejer guantes de punto para diferentes tamaños de dedos. Un dato interesante es que los romanos a pesar de ser tan detallistas, no dejaron en sus manuscritos ninguna mención a estas figuras.

5. El mapamundi de Piri Reis

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¿Cómo es posible que en un mapamundi, creado en 1513, aparezca la Antártida, que fue descubierta oficialmente en el año 1820? Este increíble hecho y la exactitud del mapa, extraordinaria para aquellos tiempos, ha resultado ser un rompecabezas para los investigadores por muchos años. Después de examinar el documento, uno de los científicos, se atrevió a asegurar que la única manera de crear un mapa de tal exactitud es con la ayuda de una fotografía aérea. Se desconocen cuáles fueron las fuentes utilizadas para la creación de este mapa por el famoso almirante turco Piri Reis, quien en sus notas, escribió que recopiló y copió datos de muchos otros mapas, entre los cuales estaban los más antiguos. Pero todo está muy claro, en el mapa del almirante, los investigadores pudieron notar el contorno de la Antártida que aparece sin la capa de hielo, tal como pudo haber sido mucho antes de la era cristiana.

6. El Disco del Príncipe Sabu

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Fue hallado por arqueólogos en Egipto en el año 1936, este disco, desde su descubrimiento ha generado un gran número de hipótesis que traen consigo nuevas interrogantes. ¿Qué uso le darían al “plato” de piedra de 61 centímetros de diámetro, creado alrededor del año 3000 antes de Cristo? Si se trata de una vajilla, es una bastante extraña e incómoda. La rueda fue inventada 1500 años después. El disco se parece mucho a una pieza de dispositivos modernos utilizada para procesos químicos, si es una de esas ¿dónde están entonces las marcas de corrosión? No podría tratarse de una hélice o de una parte de un generador eléctrico ya que ese tipo de tecnología no existía aún en esa época, pero si tiene un gran parecido. En conclusión, aún no se cuenta con una explicación lógica.

7. Las líneas de Nazca

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Estas enormes imágenes sobre la meseta de Nazca en Perú fueron vistas a principios del siglo XX desde un avión, aunque varias fuentes que datan del siglo XVI, mencionan un gran camino Inca con marcas en la arena. Aproximadamente 30 misteriosos dibujos sobre la superficie de la Tierra, son todavía bastante visibles debido al clima semi-desértico de la zona. ¿Cómo y quién los creó? Aún es un enigma. Lo único que los científicos pueden asegurar es que están ahí desde mucho antes de que llegaran los incas al valle.

En lugar hay imágenes de un lagarto de 188 metros, un colibrí de 50 metros, y muchas más.  Todas dibujadas con una línea continua. Misteriosos símbolos se pueden ver desde el punto de vista de un pájaro o si se buscan en Google Earth, usando las coordenadas 14°41’18.0″S 75°07’22.0″W.