Perder el peso ganado durante el embarazo parece mucho más fácil para las famosas. Su ejemplo provoca frustración. Sin embargo, cuando una celebridad tiene un bebé todo el mundo quiere enterarse de cada detalle. Desde el momento en que hacen el anuncio con alguna tierna publicación en Instagram, el público sigue cada etapa del proceso. El problema es, que tan pronto nace el bebé, la gente empieza a juzgar cómo luce el cuerpo de la mamá después de dar a luz, y ellas obviamente, sienten la presión de volver a como estaban antes de salir embarazadas.
Si dejamos a un lado las cuestiones estéticas y no frívolas, que generalmente ocupan y preocupan mucho a las mujeres, conviene preguntarse si tiene sentido hacer una dieta o un programa intensivo de ejercicio físico después del parto, o si la sabiduría de la naturaleza va a permitir a las mujeres volver espontáneamente a la forma física anterior a la maternidad.
¿Cómo lo hacen, entonces, algunas famosas? Pues la cosa va de tiempo y dinero. Muchas de estas profesionales para quienes la imagen es una herramienta de trabajo primordial se entrenan cinco días a la semana y contratan nutricionistas que les diseñan menús restrictivos de 200 calorías. Pero eso no sucede en todos los casos. Veamos a continuación qué comentan algunas de las celebridades que ya se han convertido en madres.
1. Empecemos hablando de la fabulosa Chrissy Teigen.
Ella y su esposo, John Legend, dieron la bienvenida a su pequeña hija, Luna, en 2016. Desde entonces, Chrissy ha sido muy abierta en la forma de criar a su hija y además para ignorar a aquellos que se atreven a criticarla a través de Twitter.
Explicó que cualquier celebridad que pierda peso rápidamente después de su embarazo es porque tiene mucha ayuda para lograrlo.
“Tenemos toda la ayuda que necesitamos para poder deshacernos de todo esto”, reveló. Además agregó que estas personas tienen acceso a nutricionistas, dietistas, y entrenadores quienes hacen que la transición sea más rápida que la de una persona que no posee recursos similares. No podemos hacer más que amar su honestidad.
2. Jennifer Love Hewitt es ahora madre de dos bebés, y no ha escapado del estrés y la presión de perder peso después del embarazo.
Después del nacimiento de su primera hija, Jennifer admitió que hay días en los que se siente deprimida, pero ella desea que su hija la vea tener una buena autoestima y buena forma.
Recientemente, decidió decir la verdad sobre el hecho de que su cuerpo no es el mismo de antes y ella se siente bien con eso.
“Todavía utilizo mucha de mi ropa de maternidad y así es como me siento bien en este momento. Nada ha vuelto a estar en el lugar que quería y tampoco me he vuelto ha poner mi otra ropa ni me he sentido bien con ella,” expresó.
3. Por su parte, Amber Rose no ha ocultado su determinación a perder el peso que ganó durante el embarazo.
Reveló que pesaba 91 kg cuando dio a luz a su hijo, y que ha estado esforzándose para recuperar su figura.
Explicó que para tal fin tuvo que ejercitarse con ayuda de un entrenador personal todos los días.
“Es difícil deshacerse de los kilos de más después del embarazo. Es tipo diferente de peso, ya que tu estómago se estira por nueve meses y no es sencillo recuperarse de eso. Estoy trabajando en ello. Ya he perdido alrededor de 13 kg,” reveló.
4. Hilary Duff le dio la bienvenida a su hijo en 2012, y todos los fanáticos del canal Disney estaban más que emocionados.
Después de dar a luz, no tuvo miedo de admitir que quería recuperar su figura, pero ella sabe que eso requiere de tiempo. “A tu cuerpo le toma nueve meses para llegar a ese punto y gana todo ese peso con un propósito,” dijo.
Y a pesar de querer recuperar su antigua figura, también se sentía bien con cómo lucía para entonces.
“Al instante que empecé a preguntarme ‘qué le había pasado a mi cuerpo’, miré a mi hermoso hijo y nunca estuve más agradecida por tener este cuerpo que ahora tengo,” expresó.
Hillary Duff
5. Jessica Simpson pasó por un duro tiempo después de ganar mucho peso en su primer embarazo, y se aseguró de hacer mejor las cosas con su segundo hijo.
“Durante mi segundo embarazo, me decía, ‘Oh, no puedo comerme todo el pastel. Sólo puedo comerme un trozo,” dijo.
Jessica es una portavoz de Weight Watchers, y ha usado el programa para ayudarse a sí misma a recuperar su peso ideal.
Reveló que cuenta puntos cada vez que come, además entrena cuatro días a la semana y camina casi un km al día.
A pesar de que ahora Jessica es más cuidadosa con su alimentación, intenta asegurarse de tomarse su tiempo en esta transición.
Admitió que trabajará semana tras semana para no sentirse frustrada, y hasta el momento le ha ido muy bien.
6. Pink afirmó que estaba más impactada por el hecho de haber tenido un bebé, que concentrándose en perder peso.
Regresó al gimnasio ocho semanas después de que su hija, Willow naciera, pero no fue un proceso sencillo.
Terminó con una cesárea de emergencia que incluso le impedía hacer sentadillas cuando intentaba ejercitarse.
“Tenía mucho miedo porque toda mi vida he hecho abdominales y estiramiento,” dijo, pero a la larga pudo hacer ejercicios dos veces al día para recuperar su figura. Agregó que está haciendo lo mejor que puede. “No me aferro a esto. Bebo vino. ¡Cada día engaño a la dieta!”
Después del nacimiento de su segundo hijo, dio a conocer a través de Instagram que tenía seis semanas de haber dado a luz y que aún no había perdido nada de peso.
¿Cuál es la mejor parte? Escribió “¡Sí, soy normal!” lo cual es muy motivador para otras madres que están pasando por la misma situación.
7. Cuando se trata de Kristen Bell y peso en el embarazo, ella es la que menos se preocupa.
Explicó que mientras intenta perder peso, esto no es algo que le quite el sueño. “No permito que esto se convierta en el tema de mi vida para el próximo año,” dijo, además agregó que usa Spanx, que son como “una tanga de cuerpo entero.”
Ella desea incentivar a otras mamás a que no se preocupen demasiado sobre cómo se ven sus cuerpos después de tener a sus bebés.
Además explicó: “Por cierto, esto es como que ¿acaso no quieres verte como si acabaras de tener un bebé? Estoy en la misma situación que tú, la misma crisis, tengo unas llantas enormes, ¡¿a quién le importa!? ¡muestra tus rollitos!”.
Kristen Bell
8. Snooki explicó que quería ser una mamá fitness y al mismo tiempo cargar a su bebé, así que empezó a entrenar después de dar a luz.
Comentó que no vio ningún resultado hasta después de cinco o seis meses de entrenamiento, lo que es totalmente normal para quienes inician un régimen de ejercicios, así como motivador para aquellos que se sienten frustrados al no ver ningún resultado.
9. Drew Barrymore entrenó después de tener a sus hijos, pero dijo que se trata más de “un trabajo mental.”
Recientemente, dijo que prefiere tener a sus hijos que ponerse un bikini. “Nunca me quedaron bien los trajes de baño, así que ahora me veo peor. Tengo celulitis, Pero prefiero tener a mis hijos y verme un poco peor usando traje de baño,” reveló.
Obviamente, eso no quiere decir que Drew siempre tuviera tanta autoestima.
“Intenté llevar una dieta libre de gluten, pues pensé que eso me ayudaría a perder peso. Pero no dio resultados. y me sentía infeliz,” afirmó. ¡Nos encanta que haya cambiado de actitud!
Amamos la manera en que estas celebridades han intentado diferentes formas de lidiar con su figura post parto.
Algunas de ella se deshicieron de esos kilos rápidamente, mientras que otras se han tomado su tiempo y no permiten que eso las mortifique. Ambos casos son perfectamente normales, y ellas son un digno ejemplo de que las mujeres deben hacer lo que las hace felices, no lo que la sociedad les diga.