Una frase inofensiva puede detonar una “guerra” cuando se trata de convivencia en pareja. “Las mujeres son generalmente más sensibles y emocionales que los hombres, lo que significa que pueden ser más reactivas”, afirma la psicoterapeuta y experta en relaciones Nicole McCance.

De hecho, según explica la especialista, muchos hombres quieren hacer una pregunta en una dirección, pero es interpretada en otra completamente opuesta que parece ofensiva aunque en origen no lo haya sido.

A continuación, te presentamos 7 preguntas que es mejor no hacer a tu pareja y la forma correcta de plantearlas, según la revista de temas masculinos, Men’s Health.

1. “¿Has hecho ejercicio esta semana?”

Puede que sea una inocente pregunta y realmente quieras saber, pero es muy probable que sea tomado como un insulto. “Ella inmediatamente creerá que tú piensas que está engordando” dice Rachel DeAlto, experta en relaciones. En definitiva, es como si le preguntaras “¿subiste de peso?”.

Si simplemente tienes curiosidad sobre sus hábitos de ejercicio, intenta con algo como “Iré al gimnasio, ¿quieres ir conmigo?”. El doctor en Psicología, Stephen C. Phillips, señala que este planteamiento “en lugar de hacer una crítica implícita en cuanto a su aptitud física o peso, expresa un deseo de pasar más tiempo juntos”.

2. “¿Cuánto te costó?”

Probablemente antes de responder, se sentirá juzgada. Phillips señala que las mujeres no quieren que sus decisiones sean cuestionadas, sobre todo cuando implícitamente se les trata de irresponsables.

Por ello, en su lugar, es más oportuno agregar algo como “da lo mismo, pero …”.

Si tu pareja compra demasiado y te preocupa, cuéntale que deseas comenzar a practicar un método de contabilización de los gastos. Dile que puede ser algo conjunto donde cada uno se compromete a guiarse por un presupuesto.

3. “¿Tengo que ir contigo donde tus padres?”

Aunque sea aburrido o te agobie visitar a tus suegros, no hagas esta pregunta. “Ella supondrá que odias a sus padres, y de inmediato se estresará por ello”, dice DeAlto.

Si realmente no deseas ir, mejor dile que estás muy cansado o que planeas adelantar trabajo, pero procura enviar saludos cariñosos a todos sus familiares, y comprométete a asistir la próxima vez.

4. “¿Tienes ganas de tener sexo?”

La cosa menos sexy que le puede pasar a una mujer, es que le pregunten si quiere tener sexo, dice DeAlto. La experta explica que detrás de esta pregunta no hay pasión y suena como si sólo quieres hacerlo y no te interesa conectar con ella.

Lo mejor es besarla, acariciarla y hacer insinuaciones sutiles. “Ella te dejará saber si está interesada”, dice la experta, y añade que así es más probable que esté dispuesta.

5. “¿Andas en tu periodo?” (cuando anda sensible o molesta)

Este comentario no sólo es grosero, además parece que no dar crédito a sus sentimientos. “Las mujeres son sensibles a la tendencia de los hombres a atribuir cualquier enojo o angustia emocional a un proceso bioquímico, y por lo tanto no es una consecuencia de la conducta de él”, señala Phillips.

En su lugar, pregúntale cómo se siente y si quieres saber por qué está molesta o sensible, simplemente pídele que te lo diga. Esto demuestra que te preocupas por ella y das validez a sus sentimientos.

6. “¿Realmente quieres usar eso?”

“Muchas mujeres son sensibles a las críticas implícitas a su apariencia”, dice Phillips. Por ello, es mejor decirle que se ve hermosa, pero que tenías ganas de verla con otro atuendo. “Cuando lo digas, tócala o abrázala. Le ayudará a sentirse aún más deseable para ti, de modo que lo interpretará como una sugerencia y no como un insulto”, añade McCance.