¿Le dicen que le están coqueteando y usted no se da cuenta? ¿O una actitud muy amigable lo confunde y lo toma de otra manera? Algunos piensan que es fácil reconocer los juegos de seducción, sin embargo, a veces no sólo el instinto es suficiente, conocer el lenguaje corporal y apoyarse en sus amigos para entender la actitud de otro parece ser la respuesta para los más despistados.

Para la psicóloga Ximena Cardona, experta en manejo del duelo y temas de seducción “El coqueteo es algo natural del ser y no sólo está ligado a lo romántico o sexual, sino que como toda buena táctica de seducción hace parte del proceso de interacción de las personas, quienes lo hacen adecuadamente obtienen lo que quieren de la vida, porque son capaces de generar sentimientos agradables en los demás a través de una sonrisa oportuna o de un intercambio de palabras” Hablamos con ella sobre los mitos más frecuentes de este ritual de seducción y las señales corporales y verbales para saber si quieren algo con usted.

¿Qué es el coqueteo?

Puede entenderse como un juego amoroso, o un ejercicio de seducción, mediante el cual una persona expresa el interés romántico o sexual que siente hacia otra; la intencionalidad de tal coqueteo, ya depende de lo que se anhele en el momento. Este se puede presentar desde el establecimiento de una conversación, una vestimenta sensual, hasta un determinado lenguaje corporal.

¿Para qué se usa?

El coqueteo se usa para expresar interés en otra persona que capta nuestra atención emocional y conocer la afinidad de ésta con el fin de establecer alguna relación amorosa, puede ser de larga duración o un preludio al sexo ocasional. Debemos tener en cuenta que el coqueteo es algo natural del ser y no sólo está ligado a lo romántico o sexual, sino que como toda buena táctica de seducción hace parte del proceso de interacción de las personas, quienes lo hacen adecuadamente obtienen lo que quieren de la vida, porque son capaces de generar sentimientos agradables en los demás a través de una sonrisa oportuna o de un intercambio de palabras.

 Para los más despistados ¿Cuáles son las señales evidentes que le están coqueteando?

• Lenguaje corporal como tocarse el pelo.

• Destacar la silueta.

• Miradas rápidas o prolongadas a los ojos o a la boca del otro.

• La proximidad al dialogar.

• La sonrisa natural que se presenta sin importar el tema de conversación.

• Las bromas juguetonas

• El contacto físico.

• Adulación moderada.

Independiente de la cultura o el lugar, cinco señales universales de seducción.

Lo realmente importante del coqueteo es el lenguaje no verbal, entre las señales más comunes existen:

• Mirada fija a los ojos o a los labios.

• El comportamiento usual de la persona que está coqueteando cambia, ejemplo si utiliza palabras inadecuadas entre amigos, cuando aparece la persona que le gusta las elimina.

• Inventar excusas extrañas solo para hablar contigo

• Hacer bromas juguetonas contigo

• Recuerda detalles sobre como se conocieron

 ¿Qué se necesita para ser un buen conquistador?

Siempre recomiendo primero que todo la honestidad y caballerosidad; seguido a esto la autenticidad, ser uno mismo, con defectos o virtudes, si lo van a querer, que lo quieran como realmente es y si los defectos son muy grandes, entonces intente mejorar por su bien y por el de su futura pareja. Otra recomendación es siempre ser atento con la otra persona. Proponer temas de conversación. Estar pendiente de los detalles. Dar lugar a la ternura y a la dulzura, es algo clave. No coquetear con otras personas, al tiempo que se está haciendo con la persona de interés, menos con las amigas o amigos. Recuerden siempre que el buen conquistador es aquel que reconoce la grandeza de una sonrisa y busca los medios para mantenerla tal y como la conoció.

¿Qué lugares se prestan para la coquetería?

Hay muchos la verdad; sin embargo pienso que la compañía importa más que el lugar; pero si de sitios se trata están los espacios de rumba, los bares, los paseos con amigos, las librerías, un restaurante, el lugar de estudio y el sitio de trabajo.

 ¿Los hombres son más despistados? ¿o si prestan atención más de la cuenta?

Pienso que no todos los hombres son así, hay muchos que están atentos a todo lo que ocurre a su alrededor; pero en dado caso que sean despistados y en algún momento presten atención a un indicio de cortejo, es un gran indicador de interés y suma millones de puntos cuando se está de conquista. No olvidemos que también hay mujeres despistadas que les están enviando miles de señales de coqueteo y ellas no lo notan; así como hay otras que están pendientes hasta del más mínimo detalle. En el proceso de conquista, uno se encuentra de todo, se trata simplemente de intentarlo con claridad y pasión.

 ¿Cuáles son los pretextos más comunes para acercarse?

Si no se conocen preguntar la hora, una dirección o una información cualquiera. Si se conocen y comparten espacios proponer temas relacionados bien sea con el estudio o el trabajo; temas relacionados con las amistades en común, preparar alguna salida grupal para romper el hielo y propiciar espacios de conquista.

¿Y señales evidentes de que no hay atracción?

Si mira para otro lado o en su defecto al celular todo el tiempo, puede indicar dos cosas o está nerviosa o es una señal grande que no hay interés. Este aspecto debe sumarse al lenguaje no verbal expresado por la persona en otros espacios de interacción, para poder sacar conclusiones.

 ¿Cuáles son los mitos más comunes alrededor del coqueteo?

• Se considera siempre que las personas coquetas, son las personas más infieles; por las habilidades de conquista que tienen, el manejo del discurso y el trato amable o cordial que brindan a otros.

• Pensamientos machistas en los cuales se encuadra la idea que las mujeres somos más coquetas que los hombres

• Por otra parte se piensa que las personas coquetas, son supremamente guapos y la realidad es que no es así, en ocasiones la persona más bella es la que menos habilidad o táctica de seducción tiene. Además el coqueteo no se trata de belleza física, sino de belleza interior expresada a través de acciones, gestos y palabras.

• En algunos países la coquetería es considerada un pecado que condena el alma; pensamiento que niega el instinto del hombre, un instinto que nos lleva a cortejar por la supervivencia del ser.

¿Qué no se debe hacer durante el coqueteo?

– No coquetear con muchas personas a la vez, se pierde lo especial de la seducción, del cortejo por así decirlo.

-No sean empalagosos o empalagosas; es bueno estar pendiente de la otra persona, pero no convertirse en su ángel guardián, ese atosigamiento puede acabar cualquier posibilidad de avanzar en la relación.

-No sean indiferentes. Compartir espacios es genial, pero tener algo de individualidad también, van a tener más temas de conversación, más posibilidad de interacción.

-No pasen los límites de la confianza, una cosa es tocar el hombro o la mano y otra es pegar en la espalda o en lugares no indicados.

-Sean ustedes mismos, no intenten camuflar su personalidad, si es que quieren mejorar algo de su forma de ser, genial, pero no inventen un personaje, porque después va a ser complicado mantenerlo; además ¿A quién no le gusta alguien natural, espontaneo, sincero? A todo el mundo le agrada una persona autentica, segura de si misma, porque así tendrá más que ofrecer y aportar a una relación.

¿Cuáles son las diferencias entre hombres y mujeres a la hora de acercarse?

Tanto hombres como mujeres al momento de coquetear están pendientes tanto de su aspecto físico, como el de la otra persona; es clave la buena higiene y demás; no me imagino a alguien coqueteando con mal aspecto, desarreglado o un olor extraño (aliento, sudoración, etc.); ya que siempre tratamos con la loción, el peinado y la vestimenta, captar la atención de alguien. Sin embargo al momento de acercarnos siempre mujeres y hombres actuamos distinto, por más que tengamos el mismo objetivo; los hombres son más directos, ellos primero observan, luego sonríen a la persona que les gusto e inmediatamente se acercan con cualquier excusa e inicia su proceso de conquista. Las mujeres somos más “pasivas”, no tan directas, primero observamos, emitimos señales con nuestras miradas, nuestras sonrisas, el movimiento de nuestro cabello, nuestra postura corporal y finalmente si el hombre se acerca hablamos e inicia nuestras tácticas de seducción. Nuestro tipo de coqueteo es más de lenguaje no verbal, contrario al de los hombres.

Si alguien es muy despistado ¿cuál es la mejor forma de hacérselo saber?

Muchos dirían que con un cartel gigante lleno de miles de colores y pensándolo bien seria hasta buena idea. Pero la verdad es que si vemos que después de intentarlo con todas las tácticas de seducción, la otra persona no reacciona frente a esto, tenemos dos opciones o le decimos, o callamos. La mejor forma de decirle es planear una salida entre romántica y casual y en el momento preciso, expresarle el interés que se siente hacia él o ella. Si es correspondido estaremos felices y si no pues al menos se habrá intentado y aprendido. Recuerden que esta vida se trata de arriesgar; de sentir, de experimentar y de crecer, siempre es mejor arrepentirse de haberlo intentado, que de quedarse quieto.

El amor es un camino de constante aprendizaje que requiere de construcción, aceptación, seducción y pasión, para que siempre de lo mejor de sí, sea de conquista pasajera o perpetua.

Fuente: K&K