“Ser bisexual duplica tus posibilidades de ligar un sábado noche”, afirmó hace muchos años Woody Allen. A lo cual, más recientemente, la escritora Ellen Hayes repuso: “Ser bisexual duplica tus posibilidades de que te digan ‘¡ni de coña!’ un sábado noche”. Sin discutir cuál de las dos citas es más exacta, nosotros decimos que, en Hollywood, lo de ir a dos bandas (o “navegar a vela y vapor”, o “tener gustos versátiles”, o…) afecta sólo a la mitad femenina de la población: mientras que Alan Cumming (The Good Wife) parece ser el único actor de EE UU que ha declarado su afinidad por los dos sexos, las actrices que afirman no discriminar en el lecho son legión. Y la última en declarar esto ha sido Gillian Anderson.
No, no han leído mal: la agente Scully de Expediente X, actualmente dedicada al teatro y la TV en Gran Bretaña, ha comentado que le gustan las chicas y los chicos, y que su primera relación estable fue con otra mujer (“una compañera de instituto”) en la revista gay Out. A sus 43 años, con tres hijos y un hombre esperándola en casa, es poco probable que Anderson haya querido atraer la atención de los medios con esta noticia. Pero algunas de las actrices a las que encontrarás en este informe se han enfrentado a acusaciones de ser, bien mujeres hetero que buscaban un empujón a su fama, bien lesbianas en el armario. Sólo una cosa es cierta: a ellas, es muy difícil que nadie les diga lo de “¡ni de coña!”.
Amber Heard
Texana de 26 años, la vecinita sexy de Bienvenidos a Zombieland (actualmente en la serie The Playboy Club) le quitó mucho hierro a eso de salir del armario como bisexual. “Salir’ quiere decir que has estado dentro, y yo nunca lo he estado”, declaró tras hacer públicas sus preferencias en 2010. Interrogada sobre la relación con su novia, la fotógrafa Tasya Van Ree, Heard paró en seco a quienes insinuaron que era una lesbiana encubierta: “He tenido relaciones muy bonitas con chicos, y ahora tengo una relación muy bonita con una mujer”, comentó. “No quiero que me pongan etiquetas”.
Megan Fox
En 2009, coincidiendo con la promoción de Transformers: la venganza de los caídos (¿casualidad?) la ex actriz fetiche y ahora enemiga acérrima de Michael Bay afirmó que le gustaban por igual las ostras y los caracoles, habiendo tenido un romance con una stripper a los 18 años. Pero eso sí, Megan aplica sus propias normas: “nunca saldría con una chica que también fuese bisex, porque eso querría decir que también se ha acostado con hombres, y los hombres siempre van sucios”. Lo cual, sumado a su relación con Brian Austin Green, matrimonio incluído, nos hace sospechar que las chicas tampoco le ponen tanto.
Anna Paquin
Para quienes recordamos lo mona y con lo riquiña que parecía cuando le dieron el Oscar por El Piano, la salida del armario de Paquin en 2010 fue un shock considerable. La actriz de True Blood dio a conocer sus gustos en el contexto de una campaña contra la homofobia, y ha hablado varias veces del rechazo que las personas bisexuales provocan tanto en la sociedad hetero como en la gay: “Siempre me he sentido una forastera, en lo personal y en lo profesional”, dijo, añadiendo que “contra los bisexuales hay muchos prejuicios, pero cuanto más hablemos de ello menos extraño resultará”. Paquin también ha aclarado que, lo que es ahora, su sexualidad tiene un solo objetivo: su novio Stephen Moyer.
Lindsay Lohan
Tras su vertiginosa caída del pedestal, sus problemas con las drogas (rehab incluída) y sus primeros roces con la ley, a muchos nos olió a cuerno quemado cuando la protagonista de Chicas malas anunció su noviazgo con la DJ Samantha Ronson en 2008. Por una parte, la pareja apenas hacía vida en común, salvo en eventos públicos. Y, por otra, cuando Lohan fue consultada por Harper’s Bazaar, soltó aquello tan mítico de “¿Bisexual? Pues a lo mejor, no me gusta clasificarme” tras afirmar, categóricamente, que lo que no era en ningún caso era lesbiana. La relación entre Ronson y Lohan no duró ni un año.
Evan Rachel Wood
¿Qué tendrán True Blood y su tomateo hemoglobínico que atraen a tantas bisexuales? La verdad, lo sospechamos, pero para resumir diremos que Wood es la otra actriz ambivalente, además de Anna Paquin, que se ha asomado al show. “Siempre me han puesto las personas andróginas”, explicaba la ex de Marilyn Manson el año pasado a Squire. “Cuando estoy con una chica, me pongo muy dominante: soy la que abre la puerta del coche, la que paga la cuenta en las cenas, y cosas así”, proseguía la actriz, que ofrece una interpretación fabulosa en Los idus de marzo.
Drew Barrymore
Para su desgracia, la actriz y productora se inició en las ‘verdades de la vida’ a muy temprana edad. Lo cual, al menos, le trajo la satisfacción de saber que, en las cosas del sexo, tiene unas miras de lo más amplias: “Cuando te acuestas con una mujer, es como si explorases tu propio cuerpo a través del de otra persona”, explicó la chica de Nunca me han besado en 2004. Y precisó: “Cuando era más joven, tuve un montón de rollos con chicas, y me encantaba”. Entre dichas afortunadas se contó, supuestamente, la periodista de moda Jane Pratt.
Saffron Burrows
Conocida por los más puretas por sus papeles en En el nombre del padre y Enigma, y por los teleadictos jóvenes debido a Boston Legal y Ley y Orden: Acción criminal, la inglesa Burrows es una de las actrices que se mosquean (y mucho) cuando se insinúa que su declarada bisexualidad es un cebo para los medios. “Últimamente, decir que has tenido rollos con chicas es una especie de moda, y eso no me gusta”, confiesa. “La vida no es una cosa de modas, sino de individuos”.
Thandie Newton
Tan elegante como exótica, y británica como Saffron Burrows, la Newton ha aparecido en Misión: Imposible 2, En busca de la felicidad y Rock’N’Rolla, entre otras. Respecto a sus apetencias carnales, declaró a la publicación gay The Advocate que sus conversaciones sobre su lado lésbico inspiraron a Oliver Stone para escribir ciertas escenas de W., filme en el que ella encarnaba a Condoleeza Rice. “Perdí la virginidad con una chica, pero no fue muy agradable. Aun así, ella era una de mis mejores amigas y la quería un montón”, prosiguió antes de definir a su esposo Ol Parker como “un hombre-mujer”. “Me pone Tim Curry en The Rocky Horror Picture Show: tómate eso como quieras”, bromeó.
Cynthia Nixon
Aunque con listas como esta parezca lo contrario, la bisexualidad en las actrices de Hollywood no se limita sólo a las chicas jóvenes y trendy. Sin ir más lejos, la actriz de Sexo en Nueva York demuestra ser tan centrada y razonable como Miranda. Tras causar cierta polvareda declarando que juntarse con su esposa Christine Maroni “había sido una elección”, la Nixon rectificó con elegancia en un comunicado: “No me gusta usar esa palabra, pero está claro que soy bisexual, y que serlo no es una opción: lo que yo elegí fue ser la pareja de una mujer”. Claro que, en un tono más jocoso, Cynthia ha definido a veces a su churri como “un señor bajito, pero con tetas”.
Angelina Jolie
A estas alturas, decir que el 50 por ciento de ‘Brangelina’ alardea de su versatilidad sexual no es ninguna novedad, pero este informe no estaría completo sin hablar de ella. Con un despertar carnal temprano y una juventud turbulenta y promiscua, Jolie tuvo una relación con la modelo Jenny Shimizu que, según la contraparte, se prolongó durante bastante tiempo. Angelina, por su parte, ha confesado que “podría haberme casado con ella”. Respecto a sus intereses sexuales, la actriz y directora indica que “me gusta de todo: los chicos que parecen chicas, las chicas que parecen chicos, gente gordita, gente flaca…”. Y concluye: “Eso es un problema gordo cuando ando por la calle”. La entendemos: menuda tortícolis…
Vía: Cinemania