Hoy se ha puesto fin a nuestro matrimonio de 20 años ante la Justicia.
Para ser sincero, ha sido surrealista. Cuando tomamos esta decisión hace meses, sentí que el mundo se acababa. En realidad, tenía miedo al pensar en cómo sería la vida sin ti. Pero ahora, me parece más fácil sobrevivir. Una vez leí un refrán alemán que decía: “El miedo hace al lobo más grande de lo que es”. En serio, me daba miedo la vida sin ti. Tú has sido una persona constante en mi vida durante mucho tiempo. De hecho, he estado contigo más que con cualquier otra persona en esta Tierra. Tú eres la voz de mi cabeza. Te debo tanto por estos últimos 20 años…. Así que quería que supieras unas cuantas cosas en este primer día de nuestra nueva relación. Sé que es raro escribirte esto hoy, pero la vida apremia y no hay tiempo para dejar sin decir las palabras adecuadas. Permíteme que comparta contigo algunos de los pensamientos y sentimientos que he experimentado hoy:
– Te mereces un premio por haber estado 20 años con un hombre como yo. Los dos sabemos que no soy fácil de querer. Soy demasiado inquieto, duermo mal, hago bromas en cualquier situación y no siempre me comporto bien. He arriesgado demasiado en nuestros años juntos. Ese es el problema de estar casado con una persona que persigue sus sueños. Tú te viste metida en aventuras para las que no habías firmado nada. Siempre me he dejado llevar por mis pasiones. Mi corazón siempre va detrás de cosas nuevas y planes locos. En parte, mi vida es como una habitación llena de dinamita… y juego demasiadas veces con fuego. Pero bueno…, tú siempre estabas dispuesta, con ese encanto del sur y esos elegantes modales, a corregir mi naturaleza atrevida y a seguirme en una nueva aventura. Ahora me doy cuenta de que tuvimos algunos éxitos, pero otras personas tuvieron que pagar un alto precio. Y estoy muy arrepentido por ello.
– Estadísticamente, fue una buena decisión. Ambos sabemos que el 50% de los matrimonios acaban en divorcio…, pero al otro 50%, lo que les espera es la MUERTE. Así que nos hemos librado de una buena :-).
– Eres una madre ESPECTACULAR. Tu bondad y tu amor por los niños es, quizás, lo más bonito de ti. Nunca sabrás de verdad lo mucho que he estudiado tu ejemplo al criar a los niños. De algún modo, respiras amor, y ellos lo notan.
– Quiero que seas feliz. Te mereces ser feliz. Estar casada y “en el ministerio” suele ser una pesadilla. La presión por tener un buen matrimonio a veces lo convierte en una verdadera lucha. Sinceramente, me alegro de que no tengas que sufrir más por esto. En mi caso, sé que es lo que debo hacer con mi vida. Pero te mereces una vida más tranquila y quiero que lo sepas.
– Que conste en actas: me volvería a casar contigo una y otra vez… aunque supiera que acabaría así. Sí, porque tenemos tres hijos maravillosos, y aunque no existieran Chloe, Titus y Silas… te habría elegido también. A día de hoy, soy una persona cambiada y mejor gracias a ti. No me puedo imaginar la vida sin pasar tiempo contigo.
– Deberías salir de WebMD (una web con información sobre salud). Los dolores de cabeza no suelen acabar en cáncer cerebral. En serio. Sería MUY MUY extraño. Puedes ser cabezota y tener mal humor. La gente como tú vive más tiempo que cualquier persona que conozcas. Deja que la muerte te sorprenda. Disfruta de los años que tienes por delante.
– No puedes evitar que yo deje de amarte. Sinceramente, intenté convencer a mi corazón para odiarte por un momento. Pero no pude. Eres demasiado buena. Lo único que me sorprendió de nuestro fracaso fue lo fácil que nos resultó volver a ser amigos. Para nosotros, es ahí donde empezó el nosotros. Y me alegro mucho de haber acabado así. Como buenos amigos. Me encanta que sigamos hablando sobre nuestros hijos, la vida, nuestros planes, sobre música y sobre los famosos que se han muerto. A mí me parece normal.
– Siempre estaré ahí para ayudarte en todo lo que necesites. Me encanta que vuelvas a estudiar y explores nuevos caminos en tu vida. Siempre voy a estar ahí para lo que necesites… porque soy tu fan. Y siempre lo seré.
– Si nuestro divorcio me ha enseñado algo, es esto: si hubiera sabido que en 20 años terminaría, habría hecho más sentadillas. Volver a quedar con chicas va a ser interesante. Un amigo mío me ha dado de alta en algo llamado Grindr, así que estoy seguro de que tendré un montón de citas en poco tiempo.
– No soy estúpido. Sé que una mujer como tú no estará sola mucho tiempo. Te haces querer. Quiero que sepas que seré fan de aquel a quien elijas. Sin duda, compartiré anécdotas embarazosas sobre ti con ellos en cuanto pueda. Supongo que ya te lo esperabas…
Creo que con esto se resume casi todo. Llevo mucho tiempo pensando en este día a medida que se iba acercando. Lo único que sabía era que quería que acabáramos bien. Creo que suena estúpido… querer que nuestro matrimonio termine “bien”. Pero sigo acordándome de la película El león en invierno. Cuando a los hijos, en prisión, les parece oír a Enrique bajando las escaleras para matarlos.
Ricardo dice: “Está ahí. Pero no le daremos esa satisfacción. Que no os vea titubear… ¡Enfrentaos como hombres!”.
Geoffrey replica: “¡Estás loco! Como si importara la forma en que uno muere…”.
Ricardo contesta: “Bueno, cuando la muerte es lo único que queda, sí que importa”.
Fue un honor tenerte durante 20 años. Para mí será un privilegio ser tu amigo el resto de tu vida.
Así que acabaré esto con unas palabras de la gran Cyndi Lauper.
“Si estás perdido, puedes buscar… y me encontrarás.
Una y otra vez.
Si te caes, te recogeré.
Te estaré esperando.
Una y otra vez”
Con todo mi corazón,
Michael
Vía: Infobae