Estamos cansados de oír hablar del bótox, que en los últimos años se ha puesto muy de moda, especialmente entre las ‘celebrities’. Una de las últimas en sumarse ha sido:
MEGAN FOX.
Pese a tener tan solo 28 años y ser considerada una de las mujeres más sexys de todo el mundo, la actriz ha decidido hacerse unos cuantos retoques en su rostro. El resultado ha sido desastroso y demasiado artificial, como se puede ver en la imagen.
LINDSAY LOHAN
Pese a su juventud, la ex chica Disney ya ha probado el bótox en más de una ocasión. Aunque este tratamiento es utilizado por muchos principalmente para reducir las arrugas de expresión, la obsesión de Lohan parece estar en los labios. En más de una ocasión se ha presentado en la alfombra roja con la boca exageradamente hinchada tras someterse a este tratamiento de rejuvenecimiento. Algunos medios han llegado a publicar recientemente que los excesos de la actriz con las inyecciones de bótox le han llegado a causar más de un problema para hacer su trabajo. Por ejemplo, según aseguran varios testigos,durante la grabación de la serie ‘2 Broke Girls’ tenía dificultades para hablar sin trabarse por lo que tuvieron que los productores optaron por hacerle un texto más sencillo.
MISCHA BARTON
Aún no ha llegado ni a la treintena, pero Mischa Barton hace tiempo que se puso manos a la obra para que no se le note ni una arruguita. La adicción al bótox de la actriz de la serie ‘O.C’ comenzó cuando apenas tenía 22 años y, poco a poco, ha hecho que haya ido perdiendo la dulzura y la frescura que caracterizaban su rostro. En algunas ocasiones se ha inyectado bótox hasta el punto de quedar prácticamente irreconocible. Algunas de las zonas que se ha retocado más visiblemente son los pómulos y los labios.
NICOLE KIDMAN
Este mismo verano la actriz australiana reconoció este mismo verano que se arrepentía muchísimo de haberse inyectado bótox en el rostro. “Lo del bótox fue un error, fruto de la presión y del deseo de querer lucir mejor”, confesó Kidman. Al parecer no le gustó nada el resultado, entre otras cosas porque su cara perdió mucha expresividad. A sus 47 años asegura que ya solo cuida su imagen “llevando una vida sana”. Asegura dormir todas las horas que puede, llevar una alimentación equilibrada y no recurrir a “nada de cirugía”.
NIKKI COX
La actriz Nikki Cox también ha arruinado su cara a base de inyectarse bótox. La estadounidense siempre ha destacado por tener una boca bastante grande y llamativa. Pero Cox parecía no conformarse con eso por lo que decidió exagerar el efecto un poco más inyectándose la famosa toxina botulínica. Sus labios pasaron de ser sexys y carnosos a ser feos y exageradamente gruesos. Al parecer, esto no es el único problema de la actriz de la serie ‘Infelices para siempre’ con su aspecto, ya que también se ha sometido a alguna que otra intervención de cirugía estética.
MEG RYAN
A sus 52 años, la prestigiosa actriz también ha caído en más de una ocasión ante las garras del bótox. Y salta a la vista que sus resultados han sido bastante dudosos. El abuso del tratamiento facial a base de bótox ha hecho que los característicos rasgos dulces con los que logró conquistar a todo el mundo hayan desaparecido por completo. También hay que decir que el bisturí ha ayudado un poquito. El caso es que a estas alturas no queda nada de la Meg Ryan que conocimos en películas como ‘When Harry Met Sally’. Ahora Ryan luce unos pómulos hinchados en exceso y unos labios que han transformado por completo la expresividad de su cara.
CARLA BRUNI
La cantante italiana siempre ha destacado por su voz dulce y por su belleza. En su empeño por mantener esta última, Bruni, de 46 años, ya ha recurrido al bótox en unas cuantas ocasiones. Uno de los resultados más exagerados tras someterse a un tratamiento con toxina botulínica fue en el año 2012, cuando la pareja de Nicolas Sarkozy acaparó absolutamente todas las portadas. El abuso del bótox ha llevado a la intérprete de ‘Quelqu’un m’a dit’ a perder prácticamente toda la expresividad de la cara, que ahora luce demasiado artificial.
¿Por qué las famosas se hacen semejantes destrozos? La mayoría de quienes lo han probado alguna vez suelen repetir (pasados unos meses la inyección pierde efecto), por lo que el bótox se ha convertido para ellas en una especie de elixir de juventud al que se han vuelto adictas.
Vía Que.es