Las tres famosas pirámides de Keops, Kefrén y Micerino en Giza, Egipto, han despertado durante miles de años multitud de teorías tanto sobre su función o propósito, como sobre su construcción.
De echo no es tan extraño que unas obras tan majestuosamente sorprendentes den lugar a todo tipo de especulaciones, conjeturas, hipótesis o teorías algo extrañas o sorprendentes, ya que las pirámides de Giza son tan grandes e imponentes, que uno, lo primero que piensa es: no puede ser… ahora cerraré los ojos y cuando los abra de nuevo, lo entenderé todo sobre ellas.
Algunas de estas antiguas teorías fueron creídas por muchas personas en la antigüedad y han dado lugar a investigaciones que han ayudado a conocer realmente su origen, construcción y significado. Así que finalmente, todo ello ha servido para poder conocer mejor las propias pirámides.
En realidad todavía queda mucho por conocer sobre ellas, existen muchas cosas desconocidas que sólo el tiempo y las investigaciones, lograrán resolver.
En la época medieval, los europeos creían que las pirámides sirvieron para almacenar grano, debido a las menciones de grandes graneros que aparecían en el Antiguo Testamento.
M. Fialin de Persigngy en el año 1845 propuso la teoría de que las pirámides fueron construidas para proteger a Egipto y Nubia de los fuertes vientos y de la arena del desierto.
Ignatius Loyola Donnelly, excongresista de Minnesota, redactó en 1882 que los habitantes de la Atlántida las construyeron durante un período de colonización.
Robert Bauval, autor de “El Misterio de Orión” afirma que las pirámides están alineadas con la constelación de Orión.
En 2014, el investigador egipcio Amir Gamal dijo al diario Elaph que cree que Israel está conspirando para robar las pirámides.
Un filósofo sueco de la década de 1800, propuso la teoría de que las pirámides fueron en realidad depósitos del turbio río Nilo.
Un líder del movimiento de los Testigos de Jehová, Joseph T. “Juez” Rutherford, escribió a principios de 1928 que las pirámides fueron construidas por Satanás.
En 1884, durante una conferencia científica en la ciudad de Filadelfia se presentó un documento donde se teorizaba sobre que las pirámides eran en realidad colinas que fueron cortadas en forma piramidal.
Charles Piazzi Smyth, astrónomo real de Escocia, publicó un libro en 1864 en el que aseguraba que la Gran Pirámide podía predecir el fin del mundo. Su predicción era que todo terminaría en 1881.
Vía: QC!