Todos sabemos que en las relaciones de pareja son difíciles y que siempre existirán discusiones, pero hay frases y palabras que no deberíamos decirle ni por muy molestos que estemos. Así que si piensa dos veces antes de hablar en una discusión.
“Tenemos que hablar”
Estas son las palabras justas para comenzar una guerra en la pareja, pues la otra parte se imagina lo peor de la situación y, por consiguiente, llega a la famosa “platica” con “la espada desenvainada”.
“Por tu culpa”
Cuando discutimos con nuestra pareja es, en la mayoría de los casos, por algo que no nos parece, y por eso, obviamente, todo nos parecerá culpa del otro; sin embargo, te recomendamos que evites esta frase, ya que puede dañar susceptibilidades.
“No estoy enojada/o”
¿Y entonces por qué haces muecas y azotas puertas? Para ti es peor que no digas lo que sientes a que lo hagas de la manera adecuada; sé honesto/a y modera las palabras con las que le dices lo que te molesta.
“Eres un/a (coloca aquí la grosería que prefieras)”
Definitivamente, una de las peores frases que, si en realidad te interesa la relación, debes de omitir a toda costa; el hecho de decir groserías es también una falta de respeto, ¡recuérdalo!
“Piensa/haz lo que quieras”
Denominada por algunos como “un golpe bajo”, esta frase puede ser interpretada como “me vale”; además indirectamente, puedes dar por terminada la discusión y hasta la relación… ¿Es eso lo que quieres?
“Debemos terminar”
Cuando estamos enojados es fácil decir cosas sin pensar y lastimar al otro; este tipo de frases que dan pie a un rompimiento crean inseguridad, debilitan la relación y destruyen ese vínculo que, con tanto esfuerzo, han creado.
“Cállate”
De nuevo las faltas de respeto; decir esta “inofensiva” palabra puede aumentar la intensidad de la discusión, además de que es una de las palabras más ofensivas que puedes utilizar.
“Tú siempre/nunca”
Con estas expresiones lo único que lograrás es hacer a un lado todas las cosas buenas que tu pareja se ha esforzado por hacer, es prácticamente menospreciar todos los momentos buenos y el empeño que ha puesto por lograrlos.
“Hiciste lo mismo que la vez pasada”
Pequeños conflictos se pueden volver gigantescos si los recuerdas a cada instante; cuando discuten y lo/a perdonas es sinónimo de “no recordarlo a cada momento” y menos si están enojados.
“Eres justo como tu padre/madre”
Seamos honestos, ¿a quién le hace gracia que a cada rato lo estén comparando con alguien? ¡A nadie! Y menos si lo haces por evocar algún defecto de la persona con la que comparas; si lo haces simplemente lo/a pondrás a la defensiva.
¿Las has usado alguna vez?
Vía: Dm10