En estos pequeños detalles cotidianos es dónde podemos tener la certeza de que el diablo existe, este pequeño tipo de circunstancias que a todos nos ha pasado más de una vez son cosas que desde la perspectiva humana son unas verdaderas “desgracias”.
A continuación te presentamos algunos pequeños desastres, que elevarían nuestros niveles de estrés al máximo, echa un vistazo: