Dice el refrán que la suerte de la fea, la bonita la desea. Pero estas famosas no se conformaron con esperar la suerte, sino que decidieron tomar sumdestino en sus propias manos y volverse no bonitas, bellísimas.
Dice el refrán que la suerte de la fea, la bonita la desea. Pero estas famosas no se conformaron con esperar la suerte, sino que decidieron tomar sumdestino en sus propias manos y volverse no bonitas, bellísimas.