Mira lo que hizo esta comunidad para espantar a los borrachos que orinan sus paredes ¡Una idea genial!

¿Cansado de que los juerguistas borrachos utilicen sus calles como un gran urinario público? Pues, siga el ejemplo de los residentes de St. Pauli, un barrio en la ciudad de Hamburgo, quienes han decidido luchar de una manera novedosa. Una organización comunitaria ha recubierto numerosas paredes con revestimientos superhidrófobos que hacen que la orina salpique hacia atrás. Es decir, la persona que está orinando va a recibir un poco de orine en sus pantalones.

Algunas paredes tienen carteles que indican que no se puede orinar, pero los borrachos no le prestan atención y reciben un “autoregalo”.

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¡Quiero hacer esto en mi ciudad!

Vía: BP/YT