Hemos visto cualquier cantidad de personas haciéndose selfies y es que la nueva tendencia de la fotografía se ha vuelto cada vez más popular, pero lo que nunca habíamos visto era que esta práctica pudiera salvar la vida de alguien.
Pues bien, esta es la historia de Jackie Nicholas, (35) una valiente mujer de Derby, Inglaterra, que después de tomarse un selfie descubrió que tenía cáncer de pecho.
Dicen que la vida se compone de casualidades. Seguro que Jackie está muy de acuerdo con esa afirmación. Un buen día, el año pasado, se tomó un selfie para solidarizarse con un hashtag que estaba triunfando en las redes sociales: #nomakeupselfie. Esta etiqueta, que significa “selfie sin maquillaje”, se englobaba dentro de una iniciativa para luchar, precisamente, contra el cáncer de mama.
Después de publicar la foto, y movida el éxito que estaba teniendo este movimiento, esta inglesa de 35 años tomó conciencia de la importancia de autoexplorarse y decidió buscar en internet cómo hacerlo. Fue entonces cuando descubrió que tenía un bulto, y tras someterse a varias pruebas médicas, su médico le confirmó lo que más temía: padecía cáncer y requería una mastectomía urgentemente y quimioterapia.
“Nunca me hubiera encontrado ese bulto si no me hubiera concienciado después de hacerme ese selfie sin maquillaje”, reconoció Jackie.
“Cuando empecé a perder mi pelo, comencé a subir fotos de mi cabeza y decidí llevar peluca muy orgullosa de ello”, reconoce, “incluso me hice fotos haciendo quimioterapia”. Otro dato más para admirar a Jackie es que decidió donar su cabello a una asociación en la que se hacen pelucas para niñas con cáncer.
Actualmente, Jackie se encuentra en revisión después de luchar contra el cáncer durante meses. Los médicos creen que ella estará libre de cáncer durante al menos los próximos cinco años.
Recuerda que está en tus manos prevenir el cáncer de seno, hazte el auto examen.
Vía: LP