Si pudiramos regresar a un momento de nuestra vida, sin duda muchos escogerían la infancia, pues es la época más inocente y maravillosa de todas. Aquí te dejamos algunas cosas que te traerán buenos recuerdos y te sacarán una sonrisa, aunque todos odiabamos un poco.
1. Hacer tu tarea.
No era suficiente con tener que estar 5 o 6 horas en la escuela, también teníamos que llegar a casa y hacer la odiosa tarea. Ahora desearía que mi tarea fuera hacer una maqueta del sistema solar.
2. Los viajes largos en automóvil.
Todo un tormento tener que permanecer sentado por horas . No sabías qué hacer, porque además si preguntabas cuánto faltaba para llegar, terminabas regañado. Lo único que podías hacer en esos casos era dormirte súper enojado.
3. Los familiares incómodos.
Todos tuvimos a un familiar incómodo que se empeñaba en ser el gracioso todo el tiempo, ¡Horrible! Más cuando llegaba de visita y te apretaba los cachetes hasta dejártelos rojos.
4. Que te obliguen a bailar en frente de todos.
Es lo peor y más cuando a tu mamá le encantó la coreografía del “ratón vaquero” que te aprendiste para día de las madres y quiere que toda tu familia sepa que tiene al mejor bailarín del mundo.
5. Las inyecciones.
No había peor tortura que las inyecciones. Pensabas que tus padres lo hacían porque te odiaban y seguramente lloraste más de lo que realmente te dolía.
6. Las fiestas familiares.
Casi siempre terminabas tan fastidiado que te dormías entre dos sillas y odiando a todo el mundo.
7. Utilizar las cosas de tu hermano mayor.
Si tienes hermanos mayores sabes de lo que hablo, era horrible que te dieran sus cosas, como su ropa o sus juguetes, jamás podías tener algo verdaderamente propio.
8. Que se acabara el recreo.
Era horrible cuando sonaba la chicharra de que el recreo se había terminado, siempre se escuchaba en el patio un “Ahhh” de tristeza. Jajaja
9. Comer verduras.
Pensabas que te hacían comer verduras para que después odiaras los dulces.
10. Que te regalaran ropa en tu cumpleaños.
Era decepcionante abrir con tanta emoción tus regalos y descubrir que lo que pensaste que era la caja de un muñeco, fueran en realidad unos calcetines bien acomodados.
11. Despertar a media noche para ir al baño.
Sin duda toda una odisea llegar al baño sin que te saliera algún fantasma. Claro, lo peor era el regreso.
12. Que te peinara tu mamá.
Esto va más para las niñas, tus ojos parecieran de oriental por tener tan estirado el pelo. ¡Era lo peor del mundo!
13. Que en navidad no te trajeran lo que pediste.
La desilusión más grande de tu vida al ver que la consola de videojuegos que tanto deseabas, era un simple juego de química. 🙁
14.Limpiar tu cuarto.
No había peor castigo que tu mamá te dijera “limpia tu cuarto”. En realidad lo que no querías era desacomodar tus juguetes que secretamente estaban escondidos en los rincones de tu habitación.
15. Que te mandaran a dormir.
Te sentías como un bebé cuando no te dejaban quedarte despierto después de las diez de la noche viendo una película.
16. Bañarte.
Era todo un reto tratar de no cerrar los ojos cuando te estabas tallando y buscabas mil pretextos para no ducharte.
17. Levantarte temprano.
No entendías por qué las clases tenían que empezar de madrugada.
18. Que tu mejor amigo tuviera el juguete que siempre quisiste.
Esto puede sonar muy envidioso, pero acepta que siempre quisiste alguno de los juguetes que tenía tu amigo.
19. Vestirte elegante.
Yo prefería mil veces andar con ropa deportiva, que un molesto vestido,o o en el caso de los niños un pequeño y aseñorado traje.
20. A los adultos.
Pensabas que eran seres de otro planeta y no entendían para nada tu mundo.
Creo que la mayoría de nosotros sigue odiando todas estas situaciones ya estando grandes, eso solo significa una cosa, ¿Seguimos siendo unos bebés?