Uno de los aspectos más importantes en la vida de todos es el trabajo, con él ganamos dinero para vivir, nos hace sentir satisfechos o realizados, nos permite conocer gente y hasta lugares distintos. Eso cuando nos va bien, cuando no, nos sentimos esclavizados en un empleo aburrido y monótono, víctima de tus jefes y sientes que no lo vale. Ya sea que te guste o no lo que haces, el trabajo es fundamental para nuestra existencia. Salvo que para muchos, ganarse ese sustento implica jugarse la vida diariamente.
5. Obrero
Trabajar en las grandes construcciones es demasiado riesgoso, muchos mueren por caídas desde altos pisos, aplastados por paredes o derrumbes de tierra, les pueden caer herramientas en la cabeza, tropezar con algún clavo salido y caer. El ambiente de trabajo es de los menos seguros debido a la cantidad de elementos que acontecen en el lugar, la mayoría de las veces son una combinación clave para los accidentes laborales. Por «fortuna» cuentas con seguro médico y un eficiente casco.
4. Domador de animales de circo
Quién no recuerda las caricaturas clásicas donde el domador de leones ha perdido la cabeza, literalmente. Tratar de domar animales feroces es muy peligroso, especialmente tratándose de leones y tigres. Si el domador es bueno formará un vínculo con el animal a través de premios y entrenamiento. Si es malo, el animal sufrirá de su abuso y estrés, que como bien sabemos, en exceso puede desencadenar un ataque. De todas formas, los animales reaccionan a sus instintos y cuando menos se espere pueden atacar ya sea al domador o al público. No son pocos los casos de leones, tigres, elefantes e incluso caballos que, en un ataque de pánico, lastiman personas.
3. Pescador de altamar
Salir a la costa en tu pequeña lancha puede no ser un gran reto, ni peligroso, pero los hombres y mujeres que trabajan en barcos pesqueros se arriesgan constantemente a perder la vida de formas horribles. Estas personas se enfrentan en primer lugar con el clima y el océano, cuando ambos están de mal temperamento, los barcos pueden naufragar dejando pocos o ningún sobreviviente. Los altos vientos pueden soltar las amarras y las cuerdas salir disparadas con tanta fuerza como para matar. En lugares fríos se puede resbalar por la borda y terminar ahogado. Puede haber fatales accidentes con los ganchos para los pescados. Son numerosas las cosas que pueden ocurrir.
2. Periodista
Sí, aunque sea difícil de creer, ser periodista es un trabajo demasiado peligroso. Aunque depende del país y el área de trabajo. Por lo general, los periodistas de investigación son los que tienen mayor tasa de mortandad. La causa: investigar donde no deben. Hay países donde la corrupción y la criminalidad son muy altos y el precio de denunciar esto y publicar la verdad es la vida misma, incluso hasta de los familiares. Los reporteros de guerra también corren mucho riesgo de morir, más aún si se trata de un país en conflicto, como sucede en Medio Oriente. Ahí es posible que graben tu decapitación en alta definición.
1. Desactivador de explosivos
El trabajo más peligroso por excelencia. En él las cosas pueden salir solo de dos formas, desactivas la bomba o mueres en el intento. Actualmente se han tomado medidas de seguridad para disminuir el riesgo como trajes y dispositivos especiales. Sin embargo, durante la Primera y Segunda Guerra Mundial, no había grandes medidas de seguridad y las bombas tenían que ser desactivadas de todos modos, así pues hubo un gran número de bajas debido a esto.