Roux es un adorable gatito que nació sin las patas delanteras. A pesar de su condición, el gatito, a veces llamado “Gato-Conejo”, nunca deja de saltar y jugar como cualquier otro gato.
Roux nació sin las dos patas delanteras.
Ella fue abandonada en un refugio, debido a que la familia que la tenía, no pudo soportar que ella no fuera capaz de enterrar sus deshechos cuando iba al baño.
Afortunadamente, un miembro del refugio la adoptó inmediatamente.
A veces es llamada, “Gato-Conejo”, porque para caminar da saltos como un conejito.
A pesar de sus problemas congénitos, Roux es una gatita completamente sana.
Ella se ha buscado la manera de hacer lo que quiera, a su modo.
Es bastante bonito saber que hay gente que es capaz de adoptar y ayudar a animales discapacitados.
¡Realmente adorable!
Vía: BP