Son muchos los que piensan que no es necesario tener mucho dinero para hacer planes divertidos y pasarlo bien. Uno de ellos es el gigante del pollo frito KFC, quien ha querido demostrarlo en una original campaña en Rumanía denominada #LittleMoneyBigFun (Poco dinero, gran diversión) como alternativa a la tendencia #RichKidsOfInstagram (Niños ricos de Instagram). A través de esta iniciativa publicitaria, la marca animó a los usuarios de Instagram a realizar versiones más “económicas” de las imágenes ostentosas que cuelgan estos niños ricos en la conocida red social.
Con el objetivo de promocionar el bajo precio de sus menús, la cadena de comida rápida tenía la intención de probar que con poco dinero también es posible divertirse. Esta campaña de KFC buscaba, entonces, la interacción con el público y, por ello, alentó a los internautas a buscar imágenes de “los niños ricos de Instagram” y realizar su particular parodia.
Detrás de esta acción de marketing digital se encuentra la agencia MRM/McCann de Rumanía, que ha trabajado bajo la dirección de Nir Refuah.
Estas son algunas de las fotografías más simpáticas de la campaña: