Demi Moore tiene 52 años pero sigue siendo una de las estrellas de Hollywood más bellas y sensuales. Sin embargo, recientemente fue fotografiada en Nueva York y su rostro no se condice con su cuerpazo ni con lo que estabamos acostumbrados a ver.

Es que la cara de la ex de Bruce Willis y Ashton Kutcher se ve envejecida y flácida, como “derretida”. Algunos especulan que su apariencia mayor se deba al exceso de bótox, a una alergia o la angustia por la vivido estos días, cuando un hombre apareció muerto en su piscina.

¿Tú qué piensas que le ocurrió?