Y te ahorrarán un montón de tiempo. ¡Tiempo que puedes pasar comiendo!
1. Usa dos tazones para cortar maíz de la mazorca sin que los granos escapen por todas partes.
Envuelve un bol pequeño en una toalla de papel (para evitar que resbale) y ponlo boca abajo dentro de un bol grande. Un molde para rosquillas también funciona fenomenal para esto, si tienes uno.
2. Quita instantáneamente el centro a una cabeza de lechuga iceberg estampándola contra una tabla de cortar.
3. Pon a remojar la pasta y esta se cocinará en cerca de 60 segundos.
¡Suena raro, pero funciona! Pon a remojo la pasta en agua, en una bolsa sellada, por un par de horas o durante la noche. Ahora puedes cocinarla super super rápido en agua hirviendo o sólo añadirle directamente una salsa caliente en una sartén y déjala acabar de hacerse allí.
4. Usa un cuchillo afilado (CON CUIDADO) para quitarle el hueso a un aguacate.
Es más seguro colocar el aguacate primero en la tabla de cortar o, tal vez, invertir en unos guantes de cota de malla.
5. Corta los aguacates directamente en la cáscara para hacer cortes en dados bien proporcionados.
Luego saca los trozos con una cuchara.
6. Pon un paño de cocina o toalla de papel húmeda bajo tu tabla de cortar para evitar que se deslice y tambaleé.
¡Bien por la seguridad!
7. Usa una cuchara para pelar un kiwi de adentro hacia fuera.
Corta los extremos del kiwi, luego desliza la cuchara bajo la piel alrededor del kiwi.
8. Ralla mantequilla congelada directamente en la masa de pastelería para una distribución rápida y uniforme.
Esto es genial para tartas, bizcochos y cualquier otra cosa donde quieras incorporar mantequilla rápidamente mientras aún está fría.
9. Carameliza cebollas en la mitad de tiempo añadiendo un poco de bicarbonato sódico.
Puedes leer la explicación completa de cómo funciona esto en Serious Eats. ¡Amo esa CIENCIA!
10. Calienta en el microondas una espiga de maíz y caerá directamente de la cáscara.
¡Nada de seda! Gracias, Ken.
11. Ralla jengibre con un rallador en lugar de molerlo.
Puedes congelar primero el jengibre para hacerlo duro y fácil de rallar.
12. Cubre tu rallador de queso con spray antiadherente para rallar de maravilla, fácil y limpiamente.
13. Calienta en el microondas limones y limas para sacar más zumo.
Irradiar cítricos durante 15 o 20 segundos ayuda a descomponer los carbohidratos de la fruta y alienta máxima liquidez. Obten más información aquí.
14. Usa un cortador de manzanas para cortar rápidamente patatas en cuñas perfectas.
Una de esas cosas que no puedes creer que no se te hayan ocurrido..
15. No es necesario pelar las patatas antes de cocerlas; la piel se desprenderá una vez estén cocinadas.
Pásalas por un baño helado cuando estén cocidas, luego quita la piel con tus manos. Esto funciona mejor con patatas Russet.
16. Quita el hueso de las cerezas con un sujetapapeles.
Mira el vídeo completo de CHOW para ver cómo.
27. Bate crema agitándola en un frasco de conservas.
Y si sigues agitando suficiente tiempo, ¡puedes convertirla en mantequilla!
18. Pela montones huevos cocidos a la vez agitándolos en la olla.
Las cáscaras se romperán y luego se caerán cuando los enjuagues. También puedes probar a agitar los huevos en un recipiente Tupperware cerrado.