Es un día radiante de verano cuando Angela Shymanski conduce de vuelta a la ciudad de Prince George, Canadá, con sus hijos Lexi y Peter. La instructora de natación está exhausta: sus hijos, una hiperactiva niña de 5 años y un niño de pocos meses, requieren toda la energía que posee. Y por un segundo la madre se queda dormida. Pero ese segundo tiene terribles consecuencias.
Fuera de control, el vehículo sale de la carretera y cae por un barranco de unos 12 metros, donde choca con un árbol. Cuando la pequeña Lexi abre los ojos, solo tiene unos cuantos rasguños. Lexi oye a su hermano de 3 meses llorando. Su madre está inconsciente tras el volante. Al pie del barranco nadie podrá ver a la familia: la muerte parece segura. Pero entonces la niña de 5 años hace algo increíble.
Lexi sale del siniestro como puede y trepa por el rocoso barranco. Una vez que llega a la carretera, hace señas a un coche para que pare. Cuando la ambulancia y los bomberos llegan, necesitan una cuerda para llegar al vehículo, que está en siniestro total. Y, sin embargo, la niña ha trepado por el barranco descalza. La madre y los niños son evacuados en helicóptero al hospital más cercano.
Peter, el bebé, sufre un edema cerebral y Ángela tiene la espalda rota, además de hemorragia interna. ¡Pero todos han sobrevivido! Y todo se lo deben a esta valiente niña. “¡Es increíble!”, dice Ángela, que aún se recupera poco a poco de sus heridas.“Es casi imposible abrir la sillita de niño en la que iba Lexi sentada. ¡Es increíble lo que hizo! Estamos profundamente agradecidos por lo que hizo y muy orgullosos de ella“.