Las plumas (lapiceros o bolígrafos, según quieras llamarles) son una de las cosas que más usamos a diario. Y seguro que conoces las sencillas pero útiles plumas de la marca BIC, pero quizá no conozcas algunos de los datos que te traemos hoy y que hasta te podrían salvar la vida.
1. El agujero en la tapita.
Los niños (y los no tan niños) llegamos a morder la tapita cuando nos concentramos. Esto llevó a que la empresa incluyera en su diseño un agujero en la punta de la tapa a partir de 1991. Si la tapa se traga por accidente, el pequeño espacio evita que la persona muera antes de recibir la atención necesaria. Se calcula que éste detalle salva la vida a unas 100 personas al año.
2. Nunca están completamente llenas de tinta.
Si te has fijado, el tubo de la tinta nunca está completamente lleno, aún cuando acabas de complar la pluma. Esto se debe a que el calor de las manos expande la tinta y, si estuviera llena, esto causaría que se derramara.
3. El otro pequeño agujero misterioso.
Este agujerito puede parecer poco importante, pero evita grandes desastres. Está diseñado para evitar los cambios de presión entre el interior y el exterior de la pluma, lo cual haría que la tinta se derramara muy fácilmente.
4. Sobre su forma hexagonal.
Esa forma ayuda a que sean más fáciles de transportar y que no rueden tan fácilmente sobre superficies lisas. Además, durante la era de los casetes, era súper útil para recorrer las cintas.
A veces pasamos por alto las pequeñas curiosidades diarias, pero también es agradable apreciar las pequeñas cosas que hacen nuestra vida más fácil.