La industria de la moda no sólo es belleza y glamour, también tiene sus lados oscuros y crueles. Así lo expresó esta modelo británica de 23 años cuando le pidieron que adelgazara aún más. “Me siento culpable porque no alcanzo vuestros ridículos e insostenibles estándares de belleza mientras vosotros os pasáis el día sentados frente a un escritorio, devorando pasteles y galletas y criticándonos por nuestro aspecto físico”, escribió en su cuenta de Facebook el martes 13.

Enojada con la agencia que la representaba –luego de este episodio decidió renunciar- Charli Howard decidió poner un freno al pedido que le hicieron: que pierda más kilos para no quedarse sin empleo. “No puedo cortarme los huesos”, arremetió en el mismo post con determinación.

La carta que la modelo publicó en las redes sociales tuvo gran repercusión ya que cientas de personas la han compartido. “Estoy abrumada por la respuesta que he tenido. La industria de la moda tiene que cambiar”, escribió después, al ver la viralización.

Dada las circunstancias, una representante de su (ex) agencia Wilhelmina London, Annette-Marie Kjean, le contestó: “Para ser justos, deberías decir la verdad sobre nuestra representación contigo como modelo. Recuerda que una vez nos dejaste por otra agencia y decidiste volver por segunda vez y nosotros te dimos la bienvenida. Te olvidaste esa parte (…) Después de muchos años intentando lo mejor para ti, es lamentable que aún te niegues a ver los hechos y elijas solo mostrar tus opiniones”.

Finalmente, Howard recogió el guante y contestó: “He aprendido a amar mi cuerpo. Irónicamente, amo ser una modelo; los lugares a los que he viajado, la gente que he conocido y me siento orgullosa de los trabajos que he hecho. Y seguiré trabajando, pero según mis condiciones. Cuando puedas representar a la mujer que soy, llamame”.