La joven Ashley Chase, comenzó a notar que su ropa interior se estaba perdiendo, en su propio apartamento y, al vivir sola, comenzó a sentirse realmente preocupada, porque no es normal que las cosas desaparezcan de su lugar, especialmente si es uno y nadie más quien tiene acceso a ellas.
Por eso, cuando se percató de que la situación era realmente extraña, decidió instalar una cámara en su apartamento, para poder entender realmente qué era lo que estaba sucediendo. Escalofriantemente, lo que descubrió es muy desagradable.
Todo comenzó cuando Ashley, se mudo al 334 East 55th Street, en Manhattan, y se percató que, después de llegar de un fin de semana fuera, uno de sus sostenes no estaba.
Pudo haberlo dejado fuera, mientras salió esos días, pero durante las siguientes semanas y meses, se percató de que muchas prendas íntimas comenzaron a desaparecer. según sus cálculos, 3 tangas, 4 sostenes más, y el top de un bikini.
Un día dejó un par de bragas en un cesto de ropa sucia y a la tarde, este desapareció misteriosamente, por lo que terminó de concluir que era alguien con acceso a su departamento.
Por eso, descargó una aplicación en su smartphone, la que se activa inmediatamente al detectar movimiento. y, fue con esa trampa que se dio cuenta de que alguien entraba a su casa, sin problemas.
Un día, 4 de septiembre, Ashley se fue a pasar el fin de semana donde una amiga, y al estar saliendo, se encontró con José Cedillo, el conserje del edificio, en el ascensor, pasaron solo 10 minutos, cuando su teléfono le avisó que alguien estaba entrando a su departamento.
Y era el propio conserje, quien entró a su departamento, sin problemas y comenzó a tomar su ropa interior y a olerla.
Al ser interrogado, el hombre admitió su crimen, afirmó que olió las prendas y después las botó a la basura. al ser enjuiciado, el hombre quedó en libertad, bajo una millonaria fianza.
Ashley, por su cuenta, decidió mudarse con un amigo, pues se siente “violada” y aterrada de pasar por lo mismo nuevamente.
¡Qué cosa más desagradable! Hasta qué punto, algunas personas son capaces de llegar, esto fue demasiado lejos.