El haber perdido más de 70 kilos en un año, por poco deja a esta chica británica sin su viaje de vacaciones a Dubái, y no es que haya sufrido alguna complicación en su salud, sino que en el aeropuerto de Londres, no la dejaron pasar, pues la fotografía de su pasaporte no coincidía con la realidad.
Y es que Keeley Farrar decidió hacer un rotundo cambio en su vida, cuando abandonó su sobrepeso y su alimentación a base se comida chatarra.