No pensé que mis conciertos de Adele por las mañanas podrían influir en mi presión arterial o sistema inmune.
No hay nada como levantarse por la mañana, prender la ducha, encontrar la temperatura perfecta del agua y cantar a todo pulmón tu canción favorita. Alanis Morissette, Adele y Coldplay suelen ser mi repertorio matutino, el mejor aliado para comenzar bien el día. Y para qué hablar de la tarde, después del trabajo cuando la radio me sorprende con un hit del momento a cuyo coro resulta imposible no sumarse. Por mi parte, ya había notado que sólo el hecho de cantar en el coche de vuelta a casa o por la mañana en la ducha mejoraba bastante mi estado de ánimo, pero ¿mi salud física?
Ahora gracias a diversos estudios realizados del tema, sé que cantar no sólo es bueno para el alma sino que también para el cuerpo: reducen el estrés, la ansiedad y liberan endorfinas, entre otros. ¡Los científicos dicen que incluso participar en un coro es más saludable que hacer yoga! Así que hoy te invito a conocer todos los beneficios que cantar trae a tu salud.
Pobres de mis vecinos, ahora sí que no me callará nadie.