Ser mujer tiene sus desventajas y una de ellas es llevar a todos lados el sostén o sujetador, definitivamente es un instrumento de tortura. HOY que explicaremos las 19 luchas que todas las que usamos este demonio tenemos para decir:
1. Cuando tu sostén intenta apuñalarte.
Te pincha el pecho Y ADEMÁS ya no puedes usar ese sostén.
2. Y cuando te provoca horribles y dolorosas quemaduras por los tirantes.
3. Cuando tu sostén actúa como almacenamiento para las sobras.
4. O como un monedero extraordinariamente seguro.
5. Cuando el sostén acolchado se hunde debido al lavado.
Pechos grumosos :(.
6. Cuando el tirante de tu sostén se niega a quedarse en su sitio.
7. Y cuando tienes que empezar a agregar clips para mantenerlo en su lugar.
8. O atarlo a tu camiseta porque te has quedado definitivamente sin opciones.
9. Cuando tienes que subirte el sostén sin tirantes a cada rato.
10. Y cuando el sostén es tan incómodo que hay que ajustarlo cada cinco segundos.
Paramount Pictures
11. Cuando tu sostén arruina una tu look.
12. E incluso se las arregla para mostrarse cuando está POR DEBAJO de una camisa.
13. Cuando tu sostén te deja esas líneas de bronceado tan incómodas.
This girl got some sun today #soburnt #bratanlines Una foto publicada por chellebell9 (@chellebell9) el
14. Cuando tienes que comprar a algunos de estos ‘ayudantes’ para darles a tus chicas un subidón.
https://twitter.com/jadecallaghanx/status/680016030589124608
15. O cuando tus chicas son un poco demasiado grandes para el sostén y se termina generando el efecto «cuatro pechos».
16. Cuando intentas quitarte un sostén deportivo sudoroso.
17. Cuando te acuerdas de lo caras que son estas trampas para pechos en realidad.
18. Cuando tus brazos no llegan a tu espalda para poder ponerte el sostén y tienes que optar por el método de «abrochar por el frente y girar posteriormente».
19. Y, por último, cuando te los quitas al final del día.
LIBERTAD.
Vía: Buzzfeed