Muchos alimentos han sufrido y sufren la mano del hombre, ya sea para bien o para mal…

Al ser manipulados y modificados genéticamente en busca de mayores beneficios, en fin, la mano del hombre está en casi todo aunque casi nunca nos lo plateemos, durante muchos años los científicos han trabajado para alterar muchas de las frutas y verduras que hoy nos comemos y lograr que tengan un aspecto completamente distinto al suyo original.

Los productos que conocemos hoy en día no eran para nada así, sino que están modificados genéticamente en su ADN para que tengan un aspecto más sabroso, duren más tiempo en las casas, tengan mayor resistencia a los pesticidas, creación de nuevos alimentos y se comercialicen con mayor facilidad. Te mostramos el antes y el después de algunos alimentos que comes habitualmente y no teníamos ni idea de su aspecto original.

Échales un vistazo:

Fresa.

Eran muy parecidas a las frambuesas, diminutas, muy pequeñas y con menos sabor del que tienen actualmente… Esta fruta de temporada que está tan rica solo tiene un inconveniente y es que dura muy poco y no tiene a penas firmeza, muchos estudios están investigando cómo modificar su ADN para obtener otra variedad que aguante mejor los pesticidas y que no tenga que ser consumida al mismo tiempo casi de comprarla.

Zanahoria.

Esta hortaliza es buenísima para la salud, para mejorar la vista y para dotar al cuerpo de la vitamina diaria que necesita, tanto es así que a lo largo de los años ha sufrido modificaciones para poder aumentar sus beneficios y ahora se está trabajando para incrementar el calcio en ellas y así poder combatir la osteoporosis.

Sandía.

¡Su aspecto es para comérsela!, están buenísimas y son una de las mejores comidas para el verano… Aunque no todos saben que se han ido modificando genéticamente con los años: Las que no llevan pepitas es obvio que muy naturales no pueden ser, así como las que son cuadradas, aunque en España no son tan comunes. Muchos estudios aseguran que son beneficiosas para mantener alejados los productos químicos que son tóxicos para la salud del ser humano.

Remolacha.

El color morado de la remolacha no siempre existió cuando la cultivaban, tuvo que ser modificada genéticamente para que creciera más rápido y fuera más resistente a las malas hierbas… Casi todas las que se producen en el mundo son transgénicas y están manipuladas, hasta el punto de que se estima que solo en EEUU suponen un 85% de las que consumen. Muchos son los expertos que han puesto en duda que sea beneficiosa para el ser humano y el medio ambiente, aunque, sin embargo, otros estudios han apuntado a que son mucho mejores a largo plazo.

Maíz.

No es nada nuevo saber que el maíz está manipulado genéticamente: Nada más que ver ese color tan atractivo que tiene, evidentemente, no siempre los cultivos fueron amarillentos y frondosos… Se crearon para resistir a los cultivos intensivos y Monsanto los puso a la venta por primera vez en 1996, hay muchas variedades, pero casi nunca, por no decir nunca, hemos comido una que sea original. Hay maíces que han logrado reproducirse naturalmente e incluso se ha comprobado que las abejas obtienen polen de ellos. En la Unión Europea están autorizados 26 tipos de maíz transgénico resistente a los herbicidas.

Berenjena.

No todas las que se comen están modificadas genéticamente, ya que existen muchísimas variedades… Unos se las comen como verduras y otros como encurtidos, ambas están buenísimas. Los expertos trabajan duramente para conseguir una variedad transgénica que la haga mucho más resistente a las larvas del fruto.

Plátano.

Viendo la imagen del antes y el después de los plátanos o bananas se entiende por qué tuvieron que modificarlas para hacerlas más atractivas al comercio… No siempre tuvieron el aspecto amarillento que tienen ahora y en bastantes ocasiones surge el debate de los que se venden en los supermercados son solo los que tienen buena apariencia y eso que dicen que lo que importa está en el interior, y que verdad es, están buenísimos aunque esté la piel negra.