Estas evidencias prueban que la evolución también ha pasado por tu propio cuerpo

La humanidad ha pasado por miles de años de evolución que la llevaron a ser lo que es hoy…

Y nuestro cuerpo continua este proceso de evolución que no pasa desapercibido, porque tenemos una serie de órganos que, aunque ya no los requerimos, están ahí recordándonos de dónde venimos… Aquí te dejamos algunas hechos para saber si tienes alguno de de ello.

Échales un vistazo:

Si tu piel suele ponerse como la de una gallina…

También se debe a pequeños músculos vestigiales que se encargan de provocarte esa sensación y erizarte los pelos.

Pon tu mano con la palma hacia arriba y unir tu meñique a tu pulgar.

Si ves algo sobresaliendo, eres parte de la gran mayoría que aún tiene el músculo llamado palmaris longus, que existe en animales que usan sus antebrazos para moverse. Sin embargo, entre el 10% y 15% de las personas ya no lo tienen y eso no las hace más débiles.

Otros músculos vestigiales los puedes encontrar alrededor de tus orejas:

Éstos eran usados por nuestros ancestros al percibir un sonido para buscar su origen.

En este vídeo hecho por Vox Observatory podrás saber más de estos recuerdos de nuestra evolución: