Hay cosas que por asquerosas que nos parezcan pueden ser incluso buenas para la salud de quienes lo hacen.
Comerse los mocos
Hay cosas que jamás admitirías que has hecho alguna vez en la vida. Entre ellas, casi con total seguridad se encontrará la de sacarse un moco. No está bien visto y desde pequeños estamos acostumbrados a oír eso de ‘niño, deja de hurgarte la nariz’. Pese a que son muchos los niños que tienen esa costumbre, con el paso de los años consiguen entender que no es algo que se debe hacer. Por lo tanto, si sacarse un moco es algo ‘asqueroso’, qué decir de comérselo.
Sin embargo, pese a que sea algo totalmente asqueroso y que a muy pocos se les ocurre hacer, un estudio apunta que esta práctica tan impopular tiene beneficios para la salud de los más pequeños.
Los mocos están formados por agua, proteínas, células e hidratos de carbono y hacen que el sistema inmunitario de los niños se vea reforzado. Podríamos decir que actúan en el cuerpo de los más pequeños como una especie de vacuna.
Y si esto te ha sorprendido, no creas que es lo único asqueroso que puede ser bueno para la salud.
Morderse las uñas
Si eres de las personas que no consiguen quitarse esa fea costumbre de morderse las uñas, seguro que en más de una ocasión te lo han recriminado tanto familiares como amigos. Para argumentar su reprimenda recogen las distintas razones por las que es malo para la salud. Cierto, morderse las uñas puede producir distintas infecciones e incluso debilitar su fortaleza natural. Sin embargo, un estudio elaborado por la Universidad del País Vasco reveló que no todo es negativo.
Este hábito, como comer chicle, produce dopamina, una sustancia que es beneficiosa para el cerebro. La investigación apunta que la dopamina está vinculada a la regulación del estrés, por lo que se podría considerar que morderse las uñas ayuda a eliminar la tensión acumulada.
No usar desodorante antitranspirante
El desodorante es uno de los productos de higiene personal básicos en cualquier hogar. Sin embargo, existe una corriente que le ha declarado la guerra, especialmente a los ‘antitranspirantes’, y que se niegan a utilizar ese producto. Ellos, para evitar olores, se decantan por otras de las alternativas que encontramos en el mercado.
Pues bien, según un estudio elaborado por la Universidad de Keele (Reino Unido), el uso de antitranspirantes podría estar relacionado con la posibilidad de desarrollar cáncer de mama. Eso sí, tras su publicación, el Instituto del Cáncer de Estados Unidos (NCI) apuntó que ni ese ni otros estudios “relacionaban el uso de antitranspirantes en las axilas con el cáncer de mama” y que “sus resultados eran contradictorios”.
Eructar
Hay personas que tienen gran facilidad para tirarse un eructo y a muchas de ellas no les importa presumir de su ‘cualidad’ delante de sus amigos o familiares. Sin duda, no parece una práctica recomendable para, por ejemplo, la comida en la que conoces a tus suegros, pero eructar también resulta beneficioso para la salud por distintas razones.
Si eructamos después de comer ayudamos a aliviar la presión que se acumula en el vientre. También, por ejemplo, ayuda a evitar la molesta acumulación de gases o mejora la digestión de los alimentos.
No ducharse todos los días
Quien viaja a diario en transporte público agradece que la ducha diaria sea una práctica bastante extendida. Sin embargo, pese a que pueda parecer algo poco recomendable, cada vez son más los expertos que apuntan que esta periodicidad no actúa en beneficio de nuestra salud, sino todo lo contrario.
De hecho, un estudio elaborado por la Universidad de California determinó que el exceso de agua y jabón puede dañar la capa más externa de la piel. Eso sí, distintas voces señalan que la frecuencia debe ajustarse a las necesidades de cada persona y que, por ejemplo, zonas como las axilas o los pies si requieren de un enjabonado diario.
Crujirse los dedos
Otro de los grandes mitos que circulan por la red es que crujirse los dedos es realmente malo para la salud, ya que podría producir incluso artritis. Sin embargo, los estudios que se han realizado en este sentido no han logrado certificar que esta práctica, muy molesta para algunas personas, sea perjudicial para nuestras articulaciones.
Este característico sonido se produce por el aire que acumula el líquido sinovial, una sustancia que mejora el movimiento de la articulación. De hecho, los fundadores de la osteopatía interpretan este sonido como un síntoma de que la técnica se ha utilizado de forma correcta.
Tirarse y oler pedos
Tirarse un pedo está, como es lógico, muy mal visto. Pese a que es algo que todos hacemos en repetidas ocasiones a lo largo del día, hay que saber en qué lugares hay que hacerlo y en cuáles está terminantemente prohibido. Eso sí, esto no quiere decir que tirarse pedos no sea bueno para la salud, ya que de esta forma evitamos que los gases acumulados provoquen dolor abdominal.
Y para ir más allá, un estudio elaborado por la Universidad de Exeter aseguró que oler flatulencias puede reducir las probabilidades de desarrollar cáncer o sufrir ataques del corazón. Según esta investigación, esto sería posible gracias a las componentes de los pedos.