Aunque no lo creas, hay distintos estudios que aseguran que algunas partes del cuerpo revelan tu forma de ser. A continuación te presentamos 8 de ellas:

1. ¿Eres infiel?

Hay personas que son incapaces de ser fieles. Al menos esa es la explicación que dan cuando son sorprendidos por sus parejas. Sin embargo, a partir de ahora pueden decir aquello de “son mis manos, no puedo hacer nada contra eso”. Sí, aunque parezca de lo más extraño, el tamaño de los dedos de la mano determina si eres una persona fiel o infiel, concretamente la longitud del dedo índice y del dedo anular.

Así lo apunta un estudio elaborado por el Departamento de Psicología Experimental de la Universidad de Oxford y publicado por la revista ‘Biology Letters’. Según esta investigación, las personas que tienen el dedo índice más corto significa que son más promiscuas, mientras que al contrario tienen mayor facilidad para establecer relaciones a largo plazo. Esto se explicaría por el nivel de testosterona al que estamos expuestos durante el desarrollo uterino, mayor en los casos en los que el dedo índice es más corto que el anular.

2. El secreto está en los pies

Todos alguna vez nos hemos fijado en los dedos de nuestros pies y nos hemos puesto a comparar con amigos o familiares en la playa o en la piscina. Más allá de gustos, lo cierto es que su forma se distingue en cuatro categorías:

-Cuadrado: Forman parte de este grupo aquellas personas cuyos dedos de los pies tienen aproximadamente la misma longitud y significa que son muy analíticas y no toman decisiones sin antes pensar detenidamente.

-Griego: Se trata de pies en los que el dedo índice es el más largo de todos. Esto quiere decir que eres una persona muy activa y capaz de contagiar tu energía a los que te rodean.

-Romano: También se conoce como pie común, ya que es aquel en el que la longitud de los dedos forma una pequeña pendiente. En este caso destaca tu carácter aventurero y facilidad para conocer gente.

-Afilado: La peculiaridad de estos pies es que sus dedos están muy apiñados. En este caso, se trata de personas muy soñadoras y que buscan alcanzar todas sus metas.

3. Más que besos

Distintos psicólogos apuntan a que la forma de los labios también puede revelar nuestra forma de ser. En esta clasificación encontramos hasta seis categorías:

-Los labios anchos se traducirían en una persona inmadura, pero con gran autoestima.

-Los labios finos apuntan que se trata de una persona tímida y sensible.

-Los labios con forma de corazón esconden a una persona independiente y con libertad para expresar sus sentimientos.

-Los labios ovalados apuntan hacia una persona con vitalidad y espíritu aventurero.

-Si tienes una boca pequeña, sueles ser una persona amable y cuyas amistades son verdaderas.

-Y si tienes la boca ancha, significa que te gusta la perfección y que luchas hasta que la consigues.

4. ¿Atraes a los mentirosos?

Seguro que has escuchado en más de una ocasión eso de ‘se lo conoce como la palma de su mano’. Sin embargo, lo que debes saber es que la palma de nuestra mano nos conoce mejor de lo que pensamos. De hecho, mírala fijamente y comprueba si sus líneas forman una letra M.

De ser así, presta atención. Estas líneas se corresponden con las del Corazón, la Vida, del Destino y de la Cabeza, y significa que eres todo un imán para los mentirosos. Eso sí, según la quiromancia, también revela que eres una persona que sabe aprovechar las oportunidades y tiene facilidad para sortear los obstáculos.

5. Tu suerte en el amor

Con un curioso y rápido test puedes saber cómo eres o cómo son en el amor simplemente con mirar el dedo meñique y comparar su tamaño con el dedo anular. En este caso hay tres opciones posibles:

– Si el meñique termina a la altura de la primera articulación del dedo anular, no destacas especialmente por tu don de palabra cuando conoces a una persona que te atrae.

– Si supera esta primera articulación del anular, lo cierto es que puedes considerarte todo un afortunado en las artes amatorias. Destacas por tu ingenio y facilidad de palabra. Podemos considerar que no cedes a la presión de una primera cita.

– Y si por el contrario no alcanza la primera articulación, tu dedo meñique revela que eres una persona muy reservada y que necesitas estar muy seguro antes de dar el primer paso.

6. Lo que tu nariz dice de ti

Es una de las zonas del rostro que dota de mayor personalidad y sí, también denota cómo es nuestro carácter:

-Grande: Suelen estar acompañadas de una persona con alta capacidad de liderazgo.

-Pequeña: Destacan por su facilidad para trabajar en equipo y por ser un tanto impacientes.

-Larga: Son personas que destacan por su habilidad para el mundo de los negocios.

-Corta: Pese a que suelen ser muy sensibles e incluso un tanto infantiles, no son dados a abrirse con facilidad.

-Puntiaguda: Este tipo de nariz suele estar acompañada de una persona con fuerte carácter y muy optimista.

-Aguileña: Son personas a las que le gusta determinar sus propias opiniones y que no se dejan influenciar con facilidad.

7. El color de tu pelo

Antes de entrar en detalles, tenemos que destacar que hablamos del color del pelo natural. De esta forma, no te dejes llevar por los tintes y preguntar cuál era su color real.

-Moreno: Se trata de una persona con fuerte carácter.

-Rubio: A este color se le otorga una alta capacidad de seducción y gran elegancia.

-Pelirrojo: Aunque no lo creas, apunta hacia personas a las que les gusta explotar su lado más sensual.

-Castaño: Son personas que destacan por su tranquilidad y que afrontan las situaciones de estrés sin perder los nervios.

8. ¿Y tus cejas?

En este caso hablamos solo de mujeres, ya que esa fue la clasificación que realizó Jean Haner, autora del libro ‘The wisdom of your face’. En ella hablaba de los distintos tipos de cejas que puede lucir una mujer y cómo es en relación su carácter. Así, por ejemplo, la especialista en análisis de rasgos faciales apuntaba que las chicas con las cejas más largas se maneja mejor en situaciones de estrés que las que las tienen más cortas; que las finas suelen ser más inseguras que las más pobladas; que las altas suelen esconder personas menos accesibles que las bajas; o que las demasiado depiladas destacan por su escasa confianza.