La década de 1990 estuvo plagada de películas increíbles que impactaron a los espectadores por sus historias, pero más aún por sus efectos especiales. Una de ellas es la mítica “Jurassic Park” que, tras su estreno el año 1993, marcó un antes y después para los dinosaurios (y no me refiero a su extinción).
Pero quién también vivió un “antes y después”, fue la pequeña Lex Murphy, interpretada por Ariana Richards que ya no es pequeña ni huye de los dinosaurios.
La pequeña actriz participó en Jurassic Park cuando tenía 13 años y varios papeles en su currículum. Cerca de 16 personajes ya la habían puesto frente a las cámaras cuando trabajó bajo la dirección de Steven Spielberg. Después del éxito de la cinta, participó de 10 más –incluyendo la secuela– hasta el 2013, cuando definitivamente dejó la actuación por un motivo muy especial.
Además de actuar, obtuvo un Título con Distinción en Bellas Artes y Drama en la Universidad Skidmore y estudió en el Centro de Arte de la Universidad de Diseño en Pasadena.
Ariana dejó la actuación para dedicarse 100% a lo que la ocupa hoy: pintar. De hecho, la acuarela de su escena más conocida en Jurassic Park (justo arriba de este párrafo) lo hizo ella misma, tiempo después del estreno de la cinta.
En una entrevista con el canal KATU, la ex-actriz y pintora mostró algunas de sus pinturas, entre las que se encuentran varios paisajes y retratos, que son su especialidad.
Su talento es tanto que pertenece a la Sociedad del Retrato de Estados Unidos.
Y, en parte, su talento es heredado, ya que si miramos con detalle el árbol genealógico de Ariana, podremos encontrar al pintor renacentista, Carlo Crivelli.
Aunque ya no sea la joven estrella del cine que vimos hace 23 años, sabemos que, con sus 36 años, sigue brillando en las galerías del mundo. Y si quieres ver más de su trabajo, puedes entrar a su sitio pinchando aquí.