Según la mitología griega aquellos que osaran miran los ojos de Medusa serían convertidos en piedra, Ramesh Darji jamás la vio pero es justo lo que le estaba pasando.
Este niño de apenas 11 años sufre un raro trastorno en la piel llamado ictiosis arlequín, condición que provocó que su piel comenzara a despegarse a los 15 días de nacido dando lugar a una nueva piel muy gruesa y de tonalidad negra.
Es tanto el grosor que se agrieta y se asemejan a blindaje o el traje de arlequín de un bufón.
“Dijo que le dolía el cuerpo y no camino más. Nunca nos pudo explicar qué le pasaba. Solo nos informaba si tenía hambre o quería ir al baño. Solía sentarse a llorar, pero nosotros no sabíamos que ocurría ni cómo ayudarlo”, explicó Nanda, padre del niño.
Para los seis años de edad ya no podía caminar, su habla también se vio afectada y por si fuera poco los demás niños lo rechazaban por su apariencia.
Pero no todo es malo pues ha podido conservar la vida algo inusual en aquellos que padecen este tipo de ictiosis.
El caso de Ramesh llamó la atención de la cantante británica Joss Stone, quien ofreció un concierto en la capital de Nepal, Katmandú, para recaudar fondos para el tratamiento del niño y gracias a ella, los padres del menor pudieron costear el tratamiento en el Hospital Clínico de Katmandu.