Hay hábitos sanos que, en exceso, resultan ser todo lo contrario. Estos son los seis más habituales.
1. Tomar el sol:
El sol es una fuente de vitamina D, la cual es necesaria en el organismo para mantener una óptima salud ósea. Tomar el sol es bueno, ya que su luz y calor nos influyen positivamente y evitan la oxidación de las células. A los recién nacidos, se recomienda que les dé la luz del sol al poco tiempo de venir al mundo para prevenir la ictericia.
Sin embargo, todo el mundo sabe que tomar el sol en exceso contribuye a aumentar el riesgo de padecer cáncer de piel.
Por eso, si se toma, hay que evitar las peores horas (suelen ser de 12 a 17,00 horas) y usar una crema de protección 50 para minimizar el impacto de los rayos ultravioleta.
2. Evitar la sal:
Siempre hemos escuchado que consumir poca sal es muy saludable. Pero, ¡ojo! Porque consumir demasiada poca sal podría tener consecuencias irreversibles para la salud.
Y es que las personas que consumen menos de 3 gramos de sodio al día tienen más probabilidades de fallecer a causa de ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares que los que consumen el doble de esa cantidad, según investigadores de la McMaster University.
3. Tomar vitaminas:
Consumir vitaminas cuando no las necesitas causa daños irreversibles a la salud. Por ejemplo, los hombres que toman demasiada vitamina E tienen más riesgo de cáncer de próstata.
4. Hacer ‘running’:
Es sin duda uno de los deportes que se ha puesto de moda y que, aparentemente, es muy sano. Sin embargo salir a correr diariamente constituye un grave riesgo para las articulaciones inferiores (tobillos, rodillas y caderas) y los ‘runners’ están expuestos a lesiones irreversibles, especialmente si no cuidan el suelo sobre el que corren.
5. Comer demasiado sano:
Está claro que hay gente que vive tan obsesionada por la alimentación sana, que no percibe que está sufriendo un trastorno denominado ortorexia nerviosa.
Es gente que siente un remordimiento atroz cuando come algo que se sale de lo comúnmente sano e incluso puede llegar a provocarse el vómito.
6. Beber mucha agua:
Beber agua es un hábito muy saludable, pero en exceso puede resultar pernicioso para la salud. La denominada hiponatremia dilucional consiste en la concentración baja de sodio en sangre por exceso de agua. Podría provocar el coma o la muerte. De hecho, recientemente se ha tenido noticia de la muerte de una mujer en Amsterdam precisamente por abusar de beber agua.