¿Alguna vez te ha pasado que compras un producto y al momento de abrirlo no es exactamente lo que el empaque te hacía creer? ¡A nosotros también! Y no es exclusivo de algún producto en específico, va desde juegos para niños, comida y ropa, hasta pasta de dientes y suplementos alimenticios.
Como consumidores francamente ya no sabemos ni qué creer, pues las empresas harán cualquier cosa (y dirán cualquier mentira) con tal que les compremos su producto. Para muestra, un botón:
1. ¿O sea, es 100% jugo pero solo tiene 27%?
2. Ya me confundí, hasta donde recuerdo UN DÍA tiene 24 HORAS
3. ¿Por qué quieres romperme el corazón?
4. ¡¡Alguien que me explique!!
5. Entonces, ¿qué es lo que estoy viendo?
6. Y sigues intentando engañarme
7. Entonces, ¡¿por qué ponen al monito escalando?!
8. ¿Cómo te atreves a jugar con mi corazón así?
9. ¿Cómo no confiar?
10. Tenía que ser un anuncio chino
11. Entonces, EEUU ¿es China?… ¿O China, EEUU?
12. Seguro de esto nadie se quejó
13. ¡No vuelvo a creer en nada ni nadie!
14. Gracias por UNA rebanada de pepperoni
15. Este conejo es un máster del disfraz
16. + Calcio pero no tiene Calcio… ¿hay explicación?
17. ¿Qué tipo de hot dogs hacen estas personas?
18. Definitivamente no es por lo que pagué
19. Mmm… quizás está muuuuy lejos el perro
20. ¡Qué gran oferta!
21. Imagínate si no fueran horneadas con cuidado
22. Si el producto se llama UNA AL DÍA…
23. Ok, no es un empaque pero… ¿por qué tanta maldad?