Lili Miquela, una chica con rostro pecoso, ojos verdes, labios carnosos y largas uñas, apareció en Instagram hace menos de cinco meses. No era ninguna celebridad, nadie la ha había visto antes, pero sus fotografías en la red social llamaron la atención. Tanto que la chica acumula ya más de 84.000 seguidores. Algunas de sus instantáneas consiguen más likes que las de famosos que aparecen en la televisión y en las páginas de revistas.
Empezó compartiendo una imagen de un top de pelo rosa, como si fuera a ser otra chica de moda más de las que pueblan las redes sociales.
Pero no iba a ser solo otra más que subía fotos de converse blancas pisando baldosas de cuadros azules.
No solo otra fan más de Paris Hilton que, con humor, escribe “mi madre en el instituto”.
Ni otra más que presume de amigos guapos.
Y se dedica a impulsar el discurso quinceañero que pretende “empoderar” diciéndoles a las jóvenes que sean “unas zorras. Que hagan lo que quieran”.
Lil Miquela no es otra más por la sencilla razón de que… nadie tiene claro si se trata de una persona real o no.
Detente en sus facciones.
Y no solo en la forma que tiene de ver el mundo.
Como cualquier otra chica Instagram, Miquela se suma a la fiebre de los Pokemons.
A medida que han ido pasando los meses, Miquela ha visto como su cuenta se ha llenado de comentarios de miles de fans que no se aclaran si ella, la chica de piel de plástico, pero con unas manos que parecen reales, existe en el mundo real o no existe.
Ella es una persona real pero edita su cara digitalmente
¿Por qué hay gente debatiendo si es real o no? Es claramente una animación
No es real. Su piel no se ajusta a los rasgos reales
Ella es una diseñadora gráfica que modifica sus fotos como obra de arte
Ella es una diseñadora gráfica o una diseñadora de vídeo juegos. Lo hace a propósito. Un rumor que corre: lo está haciendo para los SIMS 5
No puedo decidir si ella es real o no. Debería subir un vídeo de ella
Lil Miquela no despeja dudas y las incógnitas que existen alrededor de ella no solamente han capturado el interés de sus seguidores, también de medios como la BBC.
Hay quien se pregunta si Miquela no será en realidad una burla, una crítica a un mundo, el de las redes sociales, en el que muchas imágenes se pasean sobre la delgada línea que separa la realidad y la ficción.
Decir qué es cierto y qué no en un mundo virtual donde se puede alterar la realidad resulta difícil. ¿Detrás de las obvias manipulaciones de Lil Miquela, hay una chica real o es un avatar generado por un ordenador?¿Filtros o creación digital?
