No todos somos atractivos de la misma forma. Existen diferentes aspectos, no sólo el físico, que hacen que alguien resulte atractivo para una pareja o potencial novio/a.
Así lo explica el doctor Jeremy Nicholson, un destacado psicólogo social y de personalidad estadounidense experto en relaciones interpersonales, quien escribió en el portal especializado Psychology Today cuáles son las características que hacen atractiva a una persona.
El experto indica al respecto que “¿qué hace que alguien sea atractivo? ¿Es el aspecto físico, el comportamiento, la inteligencia o algo más único y especial? Con un poco de esfuerzo, probablemente podríamos pensar en alguien que es atractivo por cada una de estas razones. También podríamos hallar ejemplos de personas que son sexy por otra cualidad. Como resultado de ello, incluso si solemos preferir a un cierto ‘tipo’ de persona, raramente tenemos una idea concreta de qué es ser atractivo y por qué“.
“He pensado mucho en estas preguntas en los últimos años y he escrito varios artículos sobre el tema. Mirando hacia atrás, veo que en realidad existen una pocas maneras de ser atractivo o deseable para la pareja. Sin embargo, la forma (o formas) en que cada uno de nosotros decide ser atractivo depende de nuestras propias características y qué tipo de relación estamos buscando”, añade.
En ese sentido, asegura que existen 3 aspectos que pueden hacer a alguien atractivo para otra persona: físico, psicológico/personalidad y por comportamiento.
1. Atracción física
Esta se basa meramente en el aspecto físico. El doctor Jeremy relata que “todos sabemos que la apariencia física es importante para generar atracción. Pero de lo que mucha gente no se da cuenta es que eso puede ser más importante o menos, dependiendo del tipo de relación que quieren”.
En ese sentido, detalla que “usualmente, las relaciones que se centran exclusivamente en lo sexual y son de corta duración requieren un mayor atractivo físico, pero el aspecto físico se va volviendo menos importante a medida que una relación va creciendo en intimidad, unidad y apoyo a largo plazo“.
“En cualquier caso, las características físicas que tienden a resultar más atractivas para otros son las que indican buena salud o estado físico. No obstante, estas características tienden a cambiar a lo largo del tiempo, lo cual significa que al final los aspectos más atractivos son aquellos que están bajo nuestro control. Entonces, cosas como un buen aseo personal podrían ser más importantes que tener un busto perfecto o la nariz más simétrica”, agrega.
2. Atracción psicológica o por personalidad
Pero el atractivo físico no es lo único que importa en la atracción. En el lado contrario a eso, tenemos los rasgos y características psicológicas de cada uno, es decir, la personalidad. “Estas características motivan más a la hora de establecer una relación a largo plazo y conexiones emocionales más íntimas“, sostiene.
No obstante, hay un problema: basarse sólo en la personalidad de alguien, sin considerar otros aspectos, “puede resultar en que se generen fuertes lazos de amistad sin que haya ningún interés sexual” (o sea, algo como la tan odiada friendzone).
“Pese a ello, la atracción psicológica sigue influyendo mucho en las relaciones, especialmente en las a largo plazo. Usualmente esa forma de atracción es expresada a través de una personalidad grata y positiva (…) La mayor parte del tiempo, estas características son comunicadas por medio de la comunicación verbal. Por ello, desarrollar un atractivo psicológico implica aprender la habilidad de entenderse con el otro. Eso puede incluir tener conversaciones que creen un sentimiento de intimidad y conexión, así como discutir temas que hagan surgir un interés romántico y sexual”, concluye.
3. Atracción por el comportamiento
Esta se ubica entre el aspecto físico y psicológico, y consiste básicamente en que tener un comportamiento osado, en el sentido de “jugársela” por conquistar a la otra persona.
“A este tipo de atractivo se refiere la gente cuando dicen que sentirse seguro de sí mismo es atractivo. A veces la gente es atractiva o deseable simplemente por la forma en que actúan o se comportan. Puede que sea porque usen el lenguaje corporal adecuado, para mantenerse apartados pero interesados a la vez. También puede que sea porque tengan una mirada seductora y emocionante. Saben cómo sonreír, coquetear y destacarse por su comportamiento”, señala.
Sin embargo, “más allá del lenguaje corporal, el contacto físico también juega un rol importante en la atracción por comportamiento. De hecho, el tacto es una forma esencial de comunicarte e influenciar a otros sin palabras. Cuando lo haces de la manera correcta, tocar a alguien puede hacer que se sientan más atraídos hacia ti”.