Nuestra Santa Patrona del horror, el disgusto y el más profundo sarcasmo.
¿Prefieres salir en pijama que vestirte con un número rosado con florecitas? ¿No tienes paciencia para la gente mediocre? ¿Te han dicho que tienes más sarcasmo que sangre en el cuerpo? Entonceses bastante posible que te hayas sentido identificada con Merlina – por el Merlin, un ave de rapiña – o Miércoles, la hija de los Addams, que además de abrazar la oscuridad en su alma, odiar todas las cosas Disney y ser brutalmente honesta (énfasis en brutal), formó toda una generación de mujeres que saben combinar el negro con negro y no tienen miedo de iniciar incendios(metafóricos o literales).
1. Cuando es demasiado temprano para estar vivo y un desconocido te dice “¡Buenas! Qué hermoso día, ¿eh?”
2. Cuando un encuestador trata de preguntarte qué opinas de la gente
3. Cuando te enteras que tu café favorito no tiene productos de Halloween
“He decidido sacarte el cuero cabelludo y quemar tu villa hasta las cenizas”.
4. Cuando vas a una reunión familiar y te bombardean con preguntas sobre tu futuro
“Oh, Wednesday está en esa edad en que las niñas sólo tienen una cosa en la cabeza”.
“¿Niños?”
“Homicidio”.
5. Cuando finalmente eliminas a tu ex de Facebook
6. Cuando tus amigos te preguntan qué sentirías si un chico tratara de invitarte a salir
“Me daría lástima”.
7. Cuando tú y tu mejor amiga se encuentran con tu peor enemigo en el bar
8. Cuando escribes una respuesta para tu jefe porque te pidió que te quedaras hasta más tarde un viernes
“Ten miedo. Ten mucho miedo.”
9. Cuando te encuentras con la antipática de la escuela y la está acosando un tipo desagradable
“¡Ayuda! ¡Me muero!”
“No sé nadar”.
10. Cuando tu entusiasta colega está tratando de ganar puntos con el jefe
“¡Yo seré la victima!”
“Toda tu vida”.
11. Cuando ves a alguien caerse y quieres ayudar pero también reírte
12. Cuando cuentas algo que no tiene nada que ver contigo pero sabes que creará caos
13. Cuando la gente pregunta porqué siempre vistes de negro
“¿Por qué te vistes como si alguien hubiese muerto?”
“Dame un minuto.”
¿Te sentiste identificada?