Si a veces empiezas tu día sin energía y tus jornadas resultan improductivas, puede que estés cometiendo alguno de estos 7 errores al levantarte. Te enseñamos cuáles son y cómo combatirlos, según lo publicó el diario The Independent.
1. No postergues la alarma
Seguramente no es la primera vez que te aconsejan esto. Lo cierto es que cada vez que postergas la alarma y te quedas dormido, entras en un estado de sueño que puede ser profundo y al despertarte de nuevo te sientes cansado y perezoso.
2. No te quedes acurrucado en la cama
¡Estírate! Libera toda esa energía que no te permite ponerte de pie. ¡Manos arriba, afuera pereza! Entre más levantes tus brazos, más seguro y feliz estarás durante el día. En cambio aquellos que se levantan enrollados en sí mismos, tienden a estar estresados y adormilados.
3. Evita revisar tu correo al despertarte
Estas son excusas para no salir de la cama, además pone en evidencia tu dependencia al móvil. Hay muy pocas cosas que no pueden esperar a que llegues a la oficina para revisarlas.
4. Haz tu cama antes de salir
Por imposible que parezca, dejar tu cama hecha se asocia con incrementar tu productividad el resto del día. Además, este importante hábito es un primer paso para adoptar otras costumbres beneficiosas.
5. Evita beber café
Si eres de los que bebe sagradamente una taza de café en la mañana para despertarte, estás equivocado. Entre las 8 y 9 de la mañana, nuestro cuerpo produce grandes cantidades de una hormona llamada cortisol que regula la energía. Si tomas café antes de las 9:30 tu cuerpo reducirá la producción de la hormona y por tanto tendrás menos energía.
6. No te levantes en la oscuridad
Nuestro cuerpo está diseñado para responder a la luz del día y si te levantas con poca luz, tu cerebro podría confundirse y hacerte sentir adormilado. Si aún está oscuro, enciende una luz fuerte que no te deje más opción que levantarte.
7. No des tantas vueltas
Según científicos, tu fuerza de voluntad es limitada y si la gastas en hacer pequeñas cosas para alargar tu mañana, tendrás menos energía a lo largo del día. Enfócate en alistarte y crea una rutina que te permita moverte “en modo automático” en las mañanas y guarda tus esfuerzos para el resto de la jornada.