No tienes que casarte para disfrutar de tu propio pastel.
Para los matrimonios suelen tomar siempre las mismas fotos torpes que no son nada de originales. La pareja tomada de la mano frente a un árbol, comiendo pastel, el novio llevando a la novia en brazos y así un montón de clichés tan absurdos que ya no son nada románticos. Para burlarse un poco de esta tendencia y demostrar lo ridículas que son, los chicos decidieron recrearlas de una manera más divertida: incluyeron a personas solteras.