Jennifer Lawrence llegó a París junto a Chris Pratt para promocionar su más reciente film, Passengers, y causó conmoción en toda la ciudad por su curioso traje. Para muchos una jugada agresiva y poco estética que la hizo lucir desentonada para la ocasión, y para otros -como yo- se vio estupenda, natural y muy acorde a su estilo.
Creo que con un rostro tan hermoso como el que tiene pudiese utilizar un saco de papas y seguiría viéndose hermosa. Pero, en el mundo de la moda nunca vas a convencer a todos, y menos en París, una de las capitales mundiales para los fashionistas.
La ganadora del Oscar usó un suéter y una larga falda transparente, similar al de Elsa, protagonista de Frozen. Digamos que lució un outfit diferente, romántico y cómodo. Un estilismo firmado por Dior, que combinó con ropa interior de color gris.
La película es un love story en el espacio. Lawrence y Pratt son dos pasajeros a bordo de una nave espacial camino de una nueva vida en otro planeta. El viaje cobra un giro letal cuando sus cápsulas de hibernación misteriosamente los hacen despertar 90 años antes de alcanzar su destino. Al tiempo que los dos intentan averiguar el misterioso motivo que se esconde tras el fallo ocurrido, incapaces de negar su intensa atracción, empiezan a sentir algo el uno por el otro.
¿Qué te pareció su look?