Y se terminó, luego de dos mandatos en los que le ocurrió de todo lo que podrías imaginarte (entre ellos la muerte del líder más buscado de todo el mundo, y unos cuantos ataques terroristas) Barack Obama dejó la Casa Blanca el viernes recién pasado para darle paso a Donald Trump.

Pero luego de ocho años haciendo el mismo trabajo, podríamos entender que ya ni siquiera supiera cómo es que la gente pasa su tiempo libre. Sin embargo, él se encargó de irse de vacaciones pero con todas sus letras, porque apenas dejó el mandato, él y su esposa Michelle (<3 te amo) se fueron a Palm Springs.

Claro que no a cualquier casa de Palm Springs, sino que a la del embajador de España, que tiene PARA EL FIN DE SEMANA. Ni quiero imaginarme cómo es su casa definitiva.

Bueno, y cuando llegó decidió hacer lo que más le gusta…además de gobernar. Tomó sus palos, sus guantes y se fue a la cancha de golf con sus cuatro autos de seguridad para él solo. Porque sí, todavía será perseguido por autos de seguridad por el resto de su vida.

Solo miren su cara de relajo cuando se come ese emparedado, disfrútalo Barack, disfrútalo.

¿Qué habrías hecho tú en tu primer día de vacaciones?