La sal es un producto que siempre está en la cocina, aunque en la edad media costaba tanto que la usaban en vez del dinero. A pesar de que hoy la sal ya no vale tanto, sigue siendo un producto muy valioso que se puede usar de diferentes maneras.
Decidimos averiguar cuáles son los usos inusuales de la sal, y ¡encontramos muchas cosas interesantes!
1. Prevenir hongos en la cortina de la ducha
Si lavas la cortina de ducha recién comprada en agua salada, jamás se cubrirá de hongos.
2. Reducir la inflamación de piquetes de insectos
Para calmar rápidamente un piquete de mosquito, simplemente humedece un dedo, pásalo por sal y aplícala al área afectada.
3. Devolverles brillo a los trastes de cobre
La sal es perfecta para limpiar los trastes de cobre. Mézclala con vinagre y harina. O agrégale jugo de limón y frota la superficie que deseas limpiar. Pero antes de hacerlo, comprueba en un área poco visible cómo funcionará esto.
4. Hacer que el aceite no salpique
Agrega un poco de sal en el aceite caliente en la sartén antes de poner ahí tus alimentos. Así el aceite no salpicará a los lados.
5. Hacer velas que “no lloren”
Para que no se escurra la parafina de las velas, sumérgelas en una solución de agua con sal muy concentrada durante algunas horas. Antes de encenderlas, sécalas bien.
6. Eliminar olores desagradables del calzado
Bolsitas de tela llenas de algunas cucharadas de sal ayudarán a eliminar olores desagradables de tu calzado. Simplemente déjalas durante algún tiempo en tus zapatos. O puedes hacer algo aún más fácil: espolvorea la sal por la suela, deja que absorba los aromas, luego sacude el calzado y aspíralo.
7. Exterminar hormigas
Para exterminar hormigas, rocía el lugar que frecuentan con una solución de 25% de sal disuelta en agua. O simplemente espolvorea sal por el sitio.
8. Preparar pinturas seguras y económicas para tus hijos
Puedes hacer pinturas seguras y económicas para tus hijos de ingredientes simples. Mezcla 1 vaso de harina, 1 vaso de agua, 1 vaso de sal y colorantes alimenticios. Algunas personas agregan también un poco de aceite de girasol o azúcar.
9. Prevenir que las rebanadas de frutas y verduras se oscurezcan
En la preparación de algunos platillos muchas veces necesitamos rebanar las manzanas, peras o patatas previamente. Pero con el paso del tiempo se tornan oscuras. Para que permanezcan frescas, ponlas en un recipiente con agua fría ligeramente salada.
10. Quitar el aroma de cebolla de las manos
Muchas veces, después de picar cebolla o ajo, en las manos queda un aroma desagradable. Para eliminarlo, enjuaga bien tus manos con agua fría, espolvoréalas con la sal (puedes mezclarla con bicarbonato), frótalas ligeramente y lávalas con agua fría y jabón.
11. Hacer aromatizante natural para la casa
Para este aromatizante improvisado necesitarás 1/2 — 1 vaso de sal, 20-30 gotas de algún aceite esencial o pétalos de rosas. Revuelve todo, ponlo en un frasco o en una cáscara de naranja y ubícalo en el cuarto que quieres aromatizar.
12. Extinguir el fuego en la cocina rápidamente
Si en tu cocina se incendió algo, puedes extinguir las llamas fácilmente echándoles sal. La sal disipa el calor y corta el acceso de oxígeno. Para estos casos, mantén siempre un frasco con sal cerca de la estufa. Para estos fines también puedes usar bicarbonato, pero no uses harina.
13. Limpiar la plancha
Para limpiar la plancha, sube su temperatura al máximo. Espolvorea la sal sobre un periódico o un papel encerado y pasa la plancha por la sal.
14. Evitar que las ventanas se empañen
Para que los vidrios en tus ventanas no se empañen, rocíalos con agua, espolvorea sal sobre un paño de trapo y frota los vidrios por dentro. Verás que ya no se empañarán ni se congelarán tan rápido. O simplemente mantén la sal cerca de los vidrios en una bolsita de trapo o en el marco de la ventana.
15. Limpiar el lavaplatos
En combinación con el jugo de limón, la sal limpia el lavaplatos al mismo nivel que un producto especializado.
16. No dejes que te engañen en un restaurante
Si en un restaurante quieres cambiar tu plato (por ejemplo, te lo sirvieron con un cabello), ponle bastante sal antes de llamar al mesero. Cuando te traigan el plato nuevo, sabrás si de verdad te lo han cambiado o simplemente fingieron.