Los Hoteles son una parte integral de los viajes y ocio. Un cambio de lugar, un buen servicio y comodidad dejan buenas impresiones de las vacaciones. Otra cosa es cuando se trata de un viaje de negocios. Dejar de lado todas las historias de la gente que viajan y se enfrentan a ella: a veces puede llegar a ser muy aburrido! Tan aburrido que ni siquiera Google puede entretenerte! El héroe de nuestra historia ha encontrado una forma de entretenerse. El hombre se fue a trabajar a Azerbaiyán y se quedó en un hotel local.
El viaje parecía que iba a ser nada interesante, por eso él decidió bromear con el personal del hotel y dejo en la cama antes de salir esto…
Salí y me fui de por negocios. Y por la tarde al regresar a la habitación encontré una nota en la cama. El hombre ya estaba pensado encontrar una nota llamándole la atención!
Pero fue tal su sorpresa cuando vio un smile en la hoja. Sí, sí! El personal apreció su broma. Entonces, el cliente sintió que ahora podía hacer otras cosas más..
A la mañana siguiente a la camarera le esperaba una respuesta por parte de las almohadas sonrientes y toallas. Más tarde, el hombre admitió que todo el día no podía pensar en nada, excepto lo que encontraría en la habitación.
El desafío fue aceptado. En la cama limpia, había una carita sonriente. Y de nuevo una nota.
Ahora el cliente se dio cuenta de que su viaje no sería aburrido. Pues bien, ¡tanto mejor!
Por la mañana, antes de salir él estaba pensando sobre cómo sorprender a la criada. Al final, él construyó un insecto divertido e incluso puso botellitas de champú.
En el cuarto día, se descubrió que el hombre ya no tenia más talento. Es difícil decir que es lo que parece: un robot o un extraterrestre del planeta Júpiter.
Sin embargo, en el quinta día tuvo una idea mejor. Y entonces hizo un pulpo, o palma. ¡Qué creativo!
Me parece que se sentía como cuando un escolar se siente en espera de evaluación para el trabajo doméstico.
Y entonces al chico se le ocurrió una mejor idea, después de varios días, hizo uno de sus mejores trabajos “Nos vamos, yehh …”
En respuesta el personal le recibió una nota dulce con este mensaje: “Gracias, ¡me ha levantado el animo!” 🙂 Al parecer, este cliente logro alegrar a los trabajadores durante su estadía en este hotel.
El noveno día. En la cama se encontraba un monstruo con la lengua afuera. ¡Muy creativo!
Décimo día y último. Para la despedida, el hombre decidió abandonar su “habitación”. Era muy similar a una figura humana real …
“Muy, muy lindo”, – decía la nota encontrada en la noche. La camarera y el huésped casi se hicieron amigos.
Pero el gesto más dulce fue la despedida. Antes de salir a casa, el hombre creo un corazón con las toallas y dejó un regalo dulce para su amigo invisible.
¿De qué habla esta historia? Parece ser algo muy ingenuo, pero al mismo tiempo, nos recuerda que la alegría está en los detalles. Y a veces unos arrebatos locos pueden alegrarle el día a alguien.