Es un hecho que el machismo y el sexismo no se han terminado y probablemente no lo harán nunca, pero debo reconocer que ya vivimos en una época en la que la sociedad que lucha por la equidad de género es la mayoría. Mientras en décadas pasadas a la mujer se le veía exclusivamente como un objeto sexual y un órgano reproductivo que pertenecía a la cocina, hoy tenemos los mismos derechos y las mismas posibilidades (aunque sea de una manera general).
El mundo de la publicidad es uno de los que más ha evolucionado con el paso del tiempo, pues se tiene que adecuar a los contextos sociales correspondientes. Sin embargo, hace muchos años las marcas y los corporativos eran abiertamente sexistas en sus campañas y comerciales.
Todos se ponían la camiseta de los estereotipos culturales que existían antes y lo hacían de una manera orgullosa y entusiasta; el hombre como proveedor del hogar y el inteligente de la sociedad, y a la mujer le correspondían las labores del hogar, cuidar y educar a los hijos, y hacer todo lo necesario para “mantener feliz a su hombre”.
Lo triste de esta situación es que muchos se quedaron atrapados en ese pasado y siguen cometiendo los mismos errores, lo comprobarás echando un vistazo a continuación:
1. Como este anuncio de un producto anticaída para el cabello que utilizó una mujer desnuda como reclamo publicitario.
Este anuncio tiene el “honor” de haber ganado el premio al anuncio más machista de de 2017 según FACUA. Porque quizás el siglo XXI ha dejado de mostrarnos a mujeres bailando encantadas alrededor de un montón de lavadoras… pero la objetificación de la mujer para el deleite de la mirada masculina sigue siendo uno de los reclamos más utilizados.
2. O este anuncio del Mercado Lonja del Barranco que describía como “plan perfecto” emborrachar a una mujer con cinco copas.
Si en 2017 fue una mujer desnuda, en 2016 FACUA decidió que este era el peor anuncio del año. ¿El motivo? Considerar un planazo emborrachar a una mujer.
3. Este anuncio de sartenes (ejem) que tiene como protagonista a una niña (EJEM) y cuyo eslogan es “una nueva generación de ollas y sartenes para una nueva generación de mujeres”.
En fin.
4. Curiosamente, las mujeres del presente ya tenemos juegos de sartenes específicos “para nosotras, las mujeres”.
Porque “te hace la vida más fácil”. ¿Sabes que hace también la vida mucho más fácil? El reparto equitativo de las tareas domésticas, Ekco.
5. Este anuncio de Lipograsil que afirma que #TODAS sabemos que después de Navidad toca empezar la dieta.
Porque, para Lipograsil, las mujeres somos las únicas que debemos preocuparnos por nuestro aspecto físico.
6. La campaña de la cerveza artesanal Colegiata que mostraba a dos mujeres (una rubia y una morena, como las cervezas) para que “tú elijas”.
Claro que sí, guapi.
7. El anuncio de cementos La Unión que mostraba a una mujer como reclamo sexual… sin ningún tipo de relación con el producto.
De hecho, toda la campaña giraba alrededor de una tía buena en shorts en una obra hablándole a los obreros de normas básicas de seguridad.
8. Este anuncio para promocionar las rebajas que utilizó a tres modelos (o mejor dicho, sus culos) y lo bautizó como “remajas”.
Un juego de palabras como de primero de primaria.
9. Esta campaña del metro de Madrid que cayó en una representación excesivamente estereotipada de los roles del hombre y la mujer.
Porque todo el mundo sabe que las mujeres utilizamos el viaje en metro para pintarnos los morros y que los hombres siguen leyendo periódicos en papel.
10. Y hablando de estereotipos de género, aquí teneís la imagen de un pobre señor sufriendo durante un plan de ocio con su mujer.
Algo salido directamente de ‘Matrimoniadas’ que perpetúa la imagen del matrimonio como carga y sacrificio y la zafia “guerra de sexos”.
11. La vez que Ryanair lanzó “el calendario más sexy de 2008” utilizando a azafatas como reclamos sexuales.
La cosificación está en el aire.
12. El anuncio de Musa, un modelo de Lancia, que mostraba a una jovencísima Carla Bruni junto a la frase “¿desde cuándo a alguien le importa si eres bella por dentro?”.
Reforzando el tóxico estereotipo de que el único valor de una mujer es su belleza.
13. Este anuncio de Media Markt que seguimos sin tener claro qué nos intentaban vender porque nos cegó la machirulada.
14. O este otro anuncio, también de Media Markt, que para promocionar sus televisores de cara al Mundial decidieron poner a dos mujeres y señalar sus “delanteras”.
Qué finura.
15. Esta campaña de LIDL que deja claro que el sexismo empieza a afectarnos desde pequeños.
La campaña, denunciada ante el Consejo Audivisual de Andalucía por “machista y retógrada”, muestra claramente los estereotipos de género a los que nos vemos sometidos desde la infancia: ellos juegan con coches, ellas con cocinitas.
16. Y este anuncio de Finish “recomendado para las madres”.
Otra muestra más de cómo la publicidad sigue asumiendo la responsabilidad de la mujer en el cuidado y las tareas del hogar.
Vía: Buzzfeed